Lo dispuso el Banco Central para facilitar el acceso de las personas físicas al sistema financiero institucionalizado
Entre las
muy diversas asignaturas pendientes de la economía argentina se destaca el
elevar el grado de bancarización de la población, que se encuentra entre las
más bajas del mundo, con un 15% del PBI, entre un tercio y la mitad de la que
registran las principales economías de la región, y hasta la sexta parte de la
que se observa en las naciones altamente desarrolladas.
Una de las
consecuencias de ese fenómeno es no solo el pobre desarrollo del mercado de
capitales, sino también la ausencia de una clara cultura de ahorro en el
sistema financiero institucionalizado, con la consecuente restricción de la
difusión del crédito a familias y empresas.
De ahí que
no sorprende que como parte de la nueva política que sigue la autoridad
monetaria el directorio del Banco Central, encabezado por Guido Sandleris, haya
decidido habilitar las operaciones bancarias a través de agencias
complementarias, generalmente llamadas "corresponsalías bancarias",
en comercios y estaciones de servicio que se caracterizan por la amplia
afluencia de público. También está en línea con la política de la AFIP de
ataque contra la informalidad y la evasión.
"Las
corresponsalías bancarias podrán establecerse a través de acuerdos entre los
bancos y distintas redes de comercios o entidades -como, por ejemplo,
estaciones de servicio, supermercados, farmacias, el correo estatal",
dispuso. La decisión del BCRA fue sancionada a través de su Comunicación A
6603.
"A
partir de esta medida, las personas tendrán una alternativa complementaria,
simple y rápida para acceder a los servicios que presta un banco,
permitiéndoles entre otras operaciones abrir una cuenta, realizar un plazo
fijo, realizar sus pagos y obtener préstamos en los lugares en los que
habitualmente realizan sus actividades cotidianas", destacan fuentes del
Banco Central.
Las personas
tendrán una alternativa complementaria, simple y rápida para acceder a los
servicios que presta un banco, permitiéndoles entre otras operaciones abrir una
cuenta, realizar un plazo fijo, realizar sus pagos y obtener préstamos
Se estima
que esta normativa favorecerá especialmente a quienes viven lejos de sucursales
bancarias y se enmarca en un objetivo permanente de lograr una mayor inclusión
financiera. Así, por ejemplo, ya se encontraba habilitado el retiro de efectivo
en supermercados y otros comercios, operatoria que viene creciendo en los
últimos meses.
"Las
experiencias internacionales -en países como Brasil, México, Colombia o Perú-
han demostrado que a través de esta herramienta se logran abrir nuevos canales
de acceso al sistema financiero. Como resultado, los servicios bancarios se
transforman en efectivamente incluyentes, mejorando las condiciones de vida de
los sectores menos favorecidos de la población, así como también el desarrollo
de las pequeñas y medianas empresas", observaron los técnicos del BCRA
para avanzar con esta iniciativa que fue madurando en los últimos años.
Se estima
que la apertura de estos puntos de acceso al sistema bancario también permitirá
mejorar los procesos de pago de las más de 14 millones de prestaciones que
ANSES realiza todos los meses, en muchos casos en zonas en las cuales se
dificultan las opciones de acceso al sistema bancario por falta de sucursales
de los agentes pagadores.
Permitirá
mejorar los procesos de pago de las más de 14 millones de prestaciones que
ANSES realiza todos los meses, en muchos casos en zonas en las cuales se
dificultan las opciones de acceso al sistema bancario por falta de sucursales
de los agentes pagadores
Otro de los
grandes atributos de la extensión de la bancarización a través del sistema
comercial es que permitirá minimizar los costos de transacción y promover la
formalización de la economía en las poblaciones con baja densidad demográfica
donde no llega la cobertura de una sucursal bancaria tradicional.