Según
explicaron a DIB fuentes del Gobierno, el nuevo cuadro tarifario se explica por
la suba del 36,1% del costo mayorista dispuesto por Nación, y del 16% en el
valor de distribución, fijado por la Provincia en función del incremento de los
costos operativos, actualizados por inflación.
El Gobierno
bonaerense autorizó un aumento promedio del 24% en las tarifas eléctricas a
partir del próximo viernes, pero el impacto del nuevo tarifazo será mayor en
febrero de 2019, ya que el Ejecutivo decidió prorratear una parte de la suba
hasta ese mes, y cobrar la diferencia en cuotas.
Los detalles
del nuevo cuadro tarifario serán publicados este martes en el Boletín Oficial,
y alcanza a las cuatro grandes prestadoras provinciales y las más de 200
cooperativas, que desde agosto pasado habían visto incrementado el costo del
precio mayorista de la electricidad, regulado por la estatal Cammesa.
Los nuevos
valores comenzarán a correr desde el próximo viernes, y se harán efectivas con
las boletas que llegarán en noviembre, puesto que las prestadoras ya emitieron
las correspondientes al actual período.
Según
explicaron a DIB fuentes del Gobierno, el nuevo cuadro tarifario se explica por
la suba del 36,1% del costo mayorista dispuesto por Nación, y del 16% en el
valor de distribución, fijado por la Provincia en función del incremento de los
costos operativos, actualizados por inflación. Este esquema, según los cálculos
oficiales, se traducirá en un aumento promedio del 24% en las boletas de luz,
aunque según la región podría ser mayor.
Sin embargo,
la "letra chica" de la resolución dispone un prorrateo del 50% del
aumento del VAD, cuya diferencia comenzará a pagarse a partir de febrero, en 6
cuotas y a valores actualizados por inflación. Según pudo saber DIB, este
diferimiento se resolvió para evitar un impacto mayor en el bolsillo de los
bonaerenses: de acuerdo a los cálculos, el precio de la tarifa plena hubiera
redundado en subas del orden del 35%.
Es que de
acuerdo a la fórmula anual aprobada tras las audiencias públicas realizadas en
mayo de este año, el valor de distribución, actualizado por inflación, debía
incrementarse un 33%. En este punto, la Provincia resolvió, siguiendo una
resolución similar del ENRE para Edenor y Edesur, autorizar solo el 50% del
total "para que el aumento no impacte tanto".
Las
empresas, no obstante, no perderán: puesto que cobrarán el valor pleno desde
febrero y cobrarán la diferencia originada este año en 6 cuotas con intereses.
La intención del Gobierno es, en última instancia, atemperar el peso del
aumento durante los meses del verano, donde se registran los máximos consumos.
Compensaciones
La
resolución que será publicada mañana entrará en vigencia recién el viernes,
debido a que se estableció un período para que usuarios o asociaciones y
empresas puedan efectuar oposiciones y correcciones al nuevo cuadro tarifario.
Por otro
lado, y frente a la crisis que atraviesa la actividad productiva, el Gobierno
resolvió reducir el porcentaje percibido por el Fondo de Compensaciones, un
mecanismo solidario para amortiguar los costos de distribución en las zonas más
alejadas o con menor cantidad de usuarios. De este modo, los usuarios
residenciales continuarán contribuyendo con el 5% del total de energía
facturado, mientras que la industria pasará del 3 al 2% y los comercios del 5
al 3%.