En esa localidad bonaerense algunas familias recibieron facturas de más de 5 mil pesos, y desde la oficina de Defensa del Consumidor afirmaron que hay confusión y que no pueden explicar semejante incremento.
Las facturas
de gas comenzaron a llegar con fuertes aumentos en el interior provincial y las
consultas no tardaron en acumularse en las oficinas de
Defensa del Consumidor
locales. En Carlos Casares, los usuarios preparan un reclamo conjunto para
elevar al Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) porque muchas de las
boletas ya “son impagables” pese a que todavía no se alcanzó el periodo de
mayor consumo.
En esa localidad
bonaerense algunas familias recibieron facturas de más de 5 mil pesos, y desde
la oficina de Defensa del Consumidor afirmaron que hay confusión y que no
pueden explicar semejante incremento. “Los vecinos se están organizando en el
Concejo Deliberante para elevar un reclamo conjunto”, señalaron desde la OMIC
local a DIB. Pese a que el impacto del último incremento, que rige desde abril,
comenzó a sentirse ahora en los meses de más frío, “hay aumentos que no se
pueden explicar”, agregaron.
A partir de
ahora, los usuarios de esa localidad del noroeste bonaerense empezaron a llevar
una fotocopia de la factura al Concejo para reunir todos los reclamos y
elevarlos al Enargas. No obstante, ante la consulta de DIB fuentes de Camuzzi,
la empresa prestaría de gas, descartaron que se trate de una situación
generalizada, señalaron que son casos “particulares” y precisaron que durante
el período mayo-junio, unos 200 usuarios casarenses pagaron más de 4 mil pesos.
Asimismo, señalaron que el 55,9% recibieron facturas de menos de 500 pesos y el
77,7%, de menos de 1.000.
“Si un
usuario percibe un salto demasiado grande en su consumo o teniendo pocos
artefactos observa que el consumo registrado en su factura parece demasiado
alto, se podría estar ante una pérdida, por lo que, por estrictas medidas de
seguridad, debería convocar a un gasista matriculado para que revise las
instalaciones”, señalaron.
Asimismo,
indicaron que para Bahía Blanca, por ejemplo, durante el período mayo-junio, el
61,2% de los clientes residenciales recibieron facturas por menos de 500 pesos
(250 por mes) y el 80,6% recibió por menos de 1.000 bimestrales. Sólo al 2% le
llegaron boletas de más de 4 mil. En Necochea, el 62,4% recibió menos de 500
bimestrales y el 83,2%, menos de 1.000. En esa localidad balnearia sólo 25
clientes pagaron por encima de 4 mil pesos. “A nivel general, el 60% de las
facturas emitidas en el último periodo no superan los 500 pesos por bimestre”,
especificaron desde Camuzzi.
Más quejas
Sin embargo,
los reclamos se suman en las distintas Oficinas Municipales de Defensa del
Consumidor (OMIC). Ante la consulta de DIB, desde Bahía Blanca y Tandil,
señalaron que los reclamos también crecieron considerablemente en los últimos
días y que los usuarios se acercan con preocupación porque no pueden afrontar
esos gastos. Pese a eso, aclararon que “lo peor aún no llegó” debido a que
todavía falta el periodo de mayor consumo.
Cabe señalar
que desde abril pasado rige un nuevo aumento en la tarifa de un 24% en
promedio, pero que puede alcanzar el 40%. Y que exige un ahorro del 15% o más
para tener un descuento en las boletas. Aunque es importante aclarar que para
acceder a ese beneficio por ahorro el consumo se compara con igual bimestre,
pero no del año pasado, sino de 2015, según lo determinó una disposición del
Ministerio de Energía Nacional.
Si bien
desde esa cartera no explicaron el motivo por el cual la base de comparación es
2015, fuentes de Camuzzi señalaron que se tomó como referencia porque durante
ese año hubo temperaturas acorde con el promedio que se espera en invierno.
Esto podría explicar por qué no se percibieron ahorros y, muy por el contrario
las facturas se incrementaron considerablemente, pese a que los usuarios
realizaron un consumo menor que el del año pasado, como se consigna en algunos
reclamos.
Más de 5 mil
En Trenque
Lauquen, los usuarios locales también recibieron con sorpresa las facturas.
Según consignó el diario La Opinión, algunos montos fueron mayores a 5 mil
pesos. “Con un sólo calefactor y un termo parece una locura”, dijo Paola,
vecina de esa localidad sobre la factura que recibió de 5.186 pesos. “Tengo
todo eléctrico. No estamos en la casa en todo el día, cocinamos con garrafa en
el quincho, el que tenemos calefaccionado con salamandra”, agregó. Otros dos
usuarios señalaron que con esos mismos artefactos pagaron 2.480 y 5.500 pesos.
En Junín,
Pablo Torres, director de la empresa prestadora Grupo Servicios Junín, admitió
las quejas de usuarios por los altos montos recibidos en las facturas y sostuvo
que “se están sintiendo ahora, pero en realidad son las tarifas conformadas por
los aumentos decretados en octubre y abril”. No obstante, desde el Frente
Renovador expresaron su “preocupación” al respecto, y el actual concejal y
precandidato Patricio Fay manifestó que “las facturas de gas son una falta de
respeto a los vecinos. Es una estafa lo que está sucediendo, cientos de vecinos
consumieron un 25 por ciento menos que el año pasado y están pagando un 200 por
ciento más”.
En Tandil,
la OMIC también recibió quejas y consultas. Esa localidad es una de las
alcanzadas por la recategorización por zona fría dispuesta en marzo pasado para
unas 25 localidades en las que se modificó el umbral de consumo. Si bien
señalaron que muchos lograron bajar la categoría, los usuarios no vieron una
notable baja en el valor de la factura porque también comenzaron a aplicarse
fuerte los aumentos.
Infonoroeste