Cuando la
lluvia caía en forma torrencial, la sirena de bomberos anunciaba que algo había
sucedido, y en esas condiciones, lo más probable que se tratara de un
accidente, afortunadamente fue un vuelco de un acoplado cargado de alimentos.
El siniestro
se registró cerca de las 16 Hs. en ruta
5 a la altura del Km. 315, aproximadamente cuando el camión V. W frontal, perteneciente
a la empresa “Cereales 9 de Julio”, conducido por Darío Leiva tuvo un desperfecto
mecánico, se cortó
una manguera de aire, y se bloquearon las ruedas traseras
del acoplado, provocando una “tijera”, lo que hizo que el camión y acoplado
salieran hacia la banquina de su lado, hasta caer volcado sobre la misma,
desparramando gran parte de la carga.
Leiva le
comento a este medio que por la lluvia venia despacio y que cuando sintió el “tiro”
del acoplado, cio que el marcador del aire se venía a cero, por lo que
disminuyo aún más la velocidad, pero no pudo impedir que el acoplado hiciera el
efecto tijera. El conductor, que no sufrió ningún tipo de lesiones, destacaba
que por “suerte salió para el lado mío, que no me llevo el camión, que se pudo
detener antes de volcar todo, además si se cruza para la mano contraria no sé qué
podría haber pasado, porque llovía fuerte y venían varios vehículos de frente,
fue un milagro” resalto Leiva.
El chofer,
junto a otros compañeros de trabajo, estaban trabajando para poder rescatar la
carga y no perder la totalidad de la misma, ya que llevaba alimento balanceado
y con la lluvia, se moja rápidamente, imposibilitando su uso.