Llego
al país el 13 de marzo, luego de haber participado en importantes desfiles en
Italia y Francia. Esta junto a dos amigas modelos y luego de cumplir con la
cuarentena, cuando se lo permitan y tras algunos estudios vendría a Casares. “Pido
que si me ven en la calle en Casares no me insulten, ya habré cumplido con lo
que me correspondía, quiero ver a mi familia”.
La casarense
Moira Berntz, que triunfa en las pasarelas europeas desde hace ya varios años,
dialogo telefónicamente con Casares On Line tras su llegada a la Argentina,
después de haber participado en las últimas semanas en importantes desfiles de
Italia y Francia.
Moira
radicada en Paris, su hogar adoptivo, llego al país el viernes 13 de marzo proveniente
de Francia junto a dos modelos amigas
con quien hacen la cuarentena obligatoria en una casa campo en Pilar. Sobre su
llegada ante todo el problema y temor mundial del coronavirus, la modelo
señalo: “hace más de un mes que vengo con este tema, estaba en Francia, en
Italia donde participe de importantes desfiles y lo que puedo decir es que en
estos dos países no hicieron caso al problema que estaba latente y decidieron
hacer igual los desfiles… Yo estuve trabajando para Chanel, hasta la última
semana y en los desfiles había gente de todos lados, con barbijos, pero de
todos lados…
La gente no
hacía caso, tomaban trenes, micros, de mi parte prefería caminar, no estar
entre tanta gente… No hubo cuarentena, recién tomaron medidas cuando ya me
venia… Lo que paso en Francia e Italia,
es que creyeron que no iba a pasar nada, que era como una gripe. La gente se
relajó y no le daba importancia y a la gente mayor, lamentablemente si tiene
problemas los puede matar”.
.
Su llegada al país
“Yo regrese
a la argentina el viernes 13 de marzo. Las agencias nos enviaron a nuestros
países, no iba a venir a Argentina, ya que tenía un contrato por firmar por dos
meses en Japón y no firme, me quería venir cerca de los míos, no iba a trabajar
tranquila, además yo ayudo a mi familia y estando acá que es cerca puedo saber si necesitan algo y estar presente...
Como te
decía me pude venir, hice escala en Madrid, realmente allí sí que estaba muy heavy,
todo el mundo se quería venir, hubo mucho miedo… Cuando llegue a la Argentina sabía
que no podía ir a Casares porque tenía que hacer cuarentena obligatoria, por
eso alquilamos con dos amigas modelos que viajaron con migo, un departamento en
Palermo, estando allí los vecinos se enteraron que nosotras habíamos venido
desde Europa hacia un par de días y se pusieron un poco violentos, nos decían
que nos iban a denunciar, mi mamá y amigos nos alcanzaron un par de cosas como
agua, alimentos, pero igual recibíamos amenazas, así fue que un amigo me ofreció su casa en Pilar
para nosotras, llamamos al 107, y ellos fueron los que nos trasladaron hasta Pilar…
Cuando llegue al país, firme un papel donde me hacía responsable de quedarme
adentro de mi departamento por 15 días, que el 28 se cumple la cuarentena, pero
cuando nos pasó esto en el departamento, e incluso al lado había un vecino, un
francés que no la paso nada bien tampoco, avisamos al 107 porque si iban y no
nos encontraban podíamos ir presas. Fue la policía, nos preguntaron si teníamos
síntomas, pero por ahora estamos muy bien sin síntomas, nos hicieron poner
barbijos, guantes, ellos también protegidos y nos trasladaron hasta Pilar. Es
una casa de campo y tenemos lugar pero no podemos ver a nuestras familias.
Me ha hecho sentir discriminada
“Yo vengo
tres veces al año y no puedo ver a mi familia, esperemos que se termine pronto…
Es entendible que sientan miedos, se dijeron muchas cosas de mi, incluso antes de que yo viniera al país… nunca
pensé en ir a Casares de entrada porque debía cumplir con la cuarentena obligatoria, después
veré que pasa, si se puede viajar o no.
Es la
primera vez que me siento discriminada por la propia gente de Casares, porque
subo una foto en Instagram y me putean, la gente tiene miedo y la entiendo que
se desesperen, si voy lo hare después de 15 días y para mi tranquilidad y la de
mi familia me voy a ser unos estudios y recién ahí voy a ir si se puede viajar,
pero les pido a la gente de Casares que si
me ven no me insulten, porque ya he cumplido con la cuarentena y todo
estará bien”
Un año con mucho trabajo
“Hace tres
años que estoy viajando y vivo en París, mi casa se podría decir, hace varios años que trabajo con Chanel, y si
todo anda bien voy a firmar un contrato para que hagan la ropa con mi cuerpo.
También trabaje para Vuitton, este año
me está yendo muy bien ya no soy una chica nueva para el modelaje y por suerte
las empresas han confiado en mí y vengo trabajando muy bien, soy una afortunada
por tener mi lugarcito ante tanta competencia…
Hay que ser
muy profesional, al principio me costó, era muy impuntual y me enseñaron muchas cosas, principalmente puntualidad,
aprendí a cuidar mi lugar, mi cuerpo, mi cara, trabajo para 8 agencias y debo
ser responsable…
Ya en mayo,
todo dependerá de lo que suceda con el virus, debo regresar a Europa porque
tengo un desfile en Capri, Italia… pero como siempre me digo para darme animo “Hay
que esperar esto va a pasar”.