El economista del riñón de Axel Kicillof, criticó la gestión anterior y polemizó con el ex ministro Lacunza por el posible default provincial. “Es irresponsable sugerir que la entidad puede pagar el bono, hay restricciones y la oposición lo sabe”, dijo
Cuattromo
acaba de cumplir 37 años. Su corta edad, sin embargo, no le impide tener un
currículum en el que se destaca haber sido director del Banco Central, entre
2015 y 2016. Es la primera vez que este economista de la UBA habla en los
medios como titular del banco provincial. Mientras es entrevistado por Infobae,
toma mate. Afuera, los pasillos de su despacho de la casa central de la
entidad, en la city porteña, están cubiertos por los óleos de los últimos
presidentes del banco. Aldo Ferrer, Eduardo Amadeo, Martín Lousteau, Guillermo
Francos y Gustavo Marangoni, entre otros. El cuadro de su antecesor, Juan
Curuchet, no está listo aún. O al menos no está colgado.
Hombre del
riñón de Axel Kicillof, en medio de la discusión sobre la deuda bonaerense y un
posible default, destacó que el gobernador “fue lo suficientemente transparente
para contar la fragilidad en las cuentas públicas que encontramos”. Y criticó a
Hernán Lacunza, ex ministro de Economía bonaerense y nacional en la gestión de
Mauricio Macri.
Los
descuentos de 50% en supermercados fueron lo suficientemente onerosos como para
distorsionar todo el balance del banco. Ninguna otra entidad pública de la
anterior administración hizo algo así, nunca. Tampoco las privadas
“Hasta
último momento la gestión anterior intentó reperfilar un bono de este mismo
banco, pero no fue aprobado por los propios directores del oficialismo de ese
momento. Con respecto a este vencimiento puntual, la ex gobernadora dijo que
correspondía a la administración que asumía hacerse cargo porque los dólares no
estaban en la caja. Encontramos una provincia con problemas de acceso a los
mercados, intentando reperfilar su deuda, sin recursos en la caja y con este
bono. Todo esto en el medio de un proceso de renegociación de la deuda
nacional, que lanzó el gobierno anterior para toda la deuda del sector
público”, detalla.
- ¿Tiene lógica defaultear por USD 250
millones?
- Hoy
trabajamos buscando el consentimiento para extender el pago. La voluntad de
pago está, lo que no tenemos son los recursos. No hay acceso a los mercados, el
gobierno anterior lo perdió y luego vino un endeudamiento masivo con el FMI. Una
carrera financiera muy peligrosa.
- ¿Van a convencer al 75% de los
acreedores?
- Estamos
trabajando para tener un diálogo constructivo y alcanzar esa mayoría. Eso es
responsabilidad de Hacienda, pero igual desde el banco pusimos a disposición a
nuestro equipo.
- Más allá de lo que dijo el gobernador,
¿no sería esperable que el día que haya que pagar le pida a usted que le preste
los dólares?
- Primero,
lo razonable para todas las partes es diferir el pago de vencimiento de
capital.
- ¿Para los acreedores también?
- Sí, porque
van a tener una perspectiva más clara de la propuesta de la Nación. Axel dijo
en campaña que no iba a desvestir un santo para vestir a otro. No queremos la
manta corta. Pero además, tenemos restricciones legales para hacerlo: el plan
de encuadramiento que el Banco Central impuso desde la salida de la crisis de
2001 y del que luego se firmó una nueva versión en 2018, con las anteriores
autoridades. Los funcionarios que estuvieron hasta hace un mes lo saben. Es una
irresponsabilidad sugerir que la entidad puede pagar el bono.
- La opción del Banco Provincia al rescate
de la deuda bonaerense es una alternativa que mencionan o sugieren a diario
distintas fuentes del mercado.
- No se
puede. Lacunza lo sabe, tenemos límites para prestarle al sector público. No
hay otra forma de hacerlo. Además, se distorsionaría el rol del banco. Si
empezamos por esa vía… es lo que intentaron ellos: decían que estaba todo
ordenado y hasta el último día buscaron reperfilar un bono. Queremos poner al
banco al servicio de la producción, el empleo y la asistencia a las pymes.
Hoy
trabajamos buscando el consentimiento para extender el pago. La voluntad de
pago está, lo que no tenemos son los recursos
- El ex ministro Lacunza insiste con que sí
hay alternativas.
- Me resulta
llamativo. Afirmar que el acceso a los mercados depende sólo de la credibilidad
futura y no del nivel de stock de endeudamiento, es algo que no vi nunca. Es
como ir a un banco a pedir un crédito y que no te hagan un Veraz. Es básico.
Nos quieren correr el arco. No hay acceso a los mercados y nada tuvimos que ver
en esta situación.
- ¿Por qué la Nación no ayuda a la provincia
de Buenos Aires?
- No creo
que no ayuden. Hay un estrategia de negociación que demanda no hacer pagos de
capital. Es razonable pedir la extensión en el vencimiento de este bono. La
provincia tiene una estrategia alineada con la Nación.
- ¿Y qué opina de esa estrategia nacional?
- No conozco
detalles.
- ¿Cuál sería la mejor forma de comenzar a
negociarla?
- El
ministro Guzmán dijo algo que es clave para entender este contexto: cualquier
reestructuración tienen que ser sostenible. Hay que mirar la estructura
financiera de los bonos, pero también como le pega al perfil de financiamiento
del sector público.
- ¿Es posible negociar en los plazos que
fijó el presidente?
- Sí, claro.
Hay que trabajar para eso. Estamos en una situación de crisis financiera,
económica, social y productiva. El presidente Fernández fue muy claro: se
necesita al aporte de todos. Los acreedores tienen que aportar también para
encontrar una buena solución, algo que sea pagable. Generar estrangulamiento
financiero no resuelve los problemas de nadie.
Vamos a
anunciar la primera línea de crédito centrada en pymes y pequeños productores
en pocos días y desde la semana que viene vamos a estar muy presentes con la
Tarjeta Alimentaria en toda la provincia
- ¿Con qué banco se encontró cuando asumió?
- Tenían
prioridades muy distintas a las que tenemos para la banca pública. La situación
financiera era potencialmente complicada, por el financiamiento y por la propia
estrategia de la administración de la gestión anterior de invertir buena parte
de sus activos en Leliq. Trabajamos para cambiar ese curso. Por otro lado,
encontramos predisposición para dar vuelta la página de parte de los
trabajadores y trabajadoras. Fueron cuatro años duros para ellos y quieren
poner al banco a funcionar. Vamos a anunciar la primera línea de crédito
centrada en pymes y pequeños productores en pocos días y desde la semana que
viene vamos a estar muy presentes con la Tarjeta Alimentaria en toda la
provincia.
- ¿Cuánto le debe la provincia al banco?
- Con esos
pasivos ocurre que muchas veces son reclamos que requieren procesos de
consolidación. No sería responsable hablar hoy de números. Eso sí, esa idea de
que se solucionaron los pasivos entre ambas partes no es cierta.
- ¿Van a seguir con los descuentos de 50%
en supermercados?
- Primero
vamos por la situación crítica de los sectores productivos. Acompañamos la
campaña de verano con muchos descuentos, pero lo hacemos con responsabilidad.
La política de descuentos de 50% en supermercados fue lo suficientemente
onerosa como para distorsionar todo el balance del banco, con un costo total de
unos $8.000 millones que equivalen al resultado de un año. Ninguna otra entidad
pública de la anterior administración hizo algo así, nunca. Tampoco las
privados. No era algo del banco, venía impuesta por la provincia y por eso se
terminaron poniendo los activos en inversiones financieras.
Encontramos
una provincia con problemas de acceso a los mercados, intentando reperfilar su
deuda, sin recursos en la caja y con este bono. En el medio de un proceso de
renegociación de la deuda nacional, que lanzó el gobierno anterior para toda la
deuda del sector pública
- No siguen, entonces, los descuentos.
- Tal como
estaban planteados, no.
- ¿Tiene mucha mora?
- El sistema
en su conjunto registra más mora. En particular, tenemos una situación algo
irregular, con una gran deuda de Molino Cañuelas. Sacando ese caso, estamos en
la media del sistema. En créditos hipotecarios UVA también subió, pero está
también en el promedio. No es ahí donde nos desalineados sino en la cartera
privada.
- ¿Qué Banco Provincia quiere para dentro
de cuatro años?
- Me
gustaría que funcione como agente de desarrollo. Moderno y a la altura de los
desafíos que plantea la competencia. No le tenemos que tener miedo al sector
privado.