La
presentación de propuestas del PJ al candidato del Frente de Todos, Alberto
Fernández, no pasó desapercibida en el sector agropecuario y permitió
visualizar las diferencias cada vez más profundas que existen entre los
federados
En
Federación Agraria Argentina (FAA), las internas están a la orden del día.
Antes de la asamblea en donde Carlos
Achetoni fue ungido como presidente de la entidad, la
Asamblea Nacional de
Bases Federadas cuestionó mediante un comunicado la representatividad del
oficialismo y advirtieron que la agenda federada se encuentra más cerca del
presidente Mauricio Macri que de las necesidades de los productores.
La
conducción de Federación Agraria fue contundente al conocer este documento y
tras el primer debate presidencial se pronunciaron al respecto: “las fórmulas
más votadas en las PASO nos han fallado”, señalaron en un comunicado.
Además, la
entidad remarcó la necesidad que se reconozca al sector "como sujetos
centrales en el desarrollo del país, que se deje de pensar en el agro como mero
generador de toneladas o divisas”. Por tal motivo, los federados enfatizaron
que "ya no queremos diagnósticos. Los candidatos que han obtenido más
votos en las PASO gobiernan o han formado parte de gobiernos en el pasado y en
todos los casos nos han fallado".
Jorge Solmi
es una voz más que autorizada en el mundo federado. El ex vicepresidente de FAA
en la actualidad forma parte de las Bases Federadas, el grupo de entidades de
base que desconoce a las autoridades elegidas en el último congreso de la
entidad. Mientras el oficialismo federado se focaliza en repartir críticas y
culpas ante las propuestas del justicialismo para el agro, desde las bases
federadas tienen una perspectiva más conciliadora, que reconoce algunos puntos
a favor.
Para Solmi,
el documento elaborado por el PJ es un regreso a las plataformas electorales
que los partidos políticos elaboraron a partir de 1983. “Reflejan cuestiones
que en muchos casos coinciden con los reclamos históricos de la FAA y en otros
faltan algunas cuestiones”, analizó.
En este
sentido, sostuvo que “en un país donde se hace agricultura sobre casi un 70% de
superficie arrendada, es necesario hablar de una regulación de los
arrendamientos”, afirmó. Otro punto crucial para el directivo es el retorno del
crédito, que debe generarse sobre la base de tasas “accesibles y reales”.
Uno de los
pocos puntos de coincidencia de la conducción federada y los disidentes es la
segmentación de productores, tema que fue abordado en el documento que recibió
Alberto Fernández.
