Si
hay acuerdo, el sueldo inicial de una maestra llegará a $12.150 en septiembre
Las
declaraciones del día después de la reunión paritaria docente que, por primera
vez en cinco meses, dejó en el aire un aroma a “principio de acuerdo”, este año
estuvieron a años luz de reflejar una situación de ese tipo. Es evidente que la
extensión y la tensión, por momentos extrema, que caracterizaron a la
negociación salarial 2017 dejaron heridas abiertas y disconformismo en
distintos sectores.
Como se
sabe, el incremento que desde la víspera están debatiendo los maestros en las
escuelas (ver ejemplos en el gráfico) es del 21,5% para este año, y se pagará
sobre el sueldo 2016 más un 2,5% de recomposición por pérdida del poder
adquisitivo. A eso se suman 1.600 pesos por cargo por material didáctico y el
“no descuento” de los adelantos que el gobierno abonó en marzo y abril “a
cuenta de futuros aumentos”.
Respecto del
clima post-reunión, hay que decir que al duro discurso de las principales
espadas del gremialismo docente, que acusaron al gobierno de “sacar la plata
que negaba tener por la cercanía de las elecciones”, le salió al cruce el
ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, quien disparó: “A los
sindicatos docentes les da alergia hablar de presentismo”. Acto seguido
anticipó que el Ejecutivo va a implementar ese beneficio en forma “unilateral”.
Vale recordar
que la eliminación de la oferta oficial del plus por presentismo -atado a una
baja del ausentismo- y la propuesta paritaria trianual (2017-2019) fueron dos
de los elementos que destrabaron una negociación que se había convertido en una
madeja casi imposible.
El titular
de la cartera económica opinó, asimismo, que si el gobierno presentaba “esta
propuesta el 6 de febrero -fecha de la primera reunión paritaria- los gremios
la hubiesen rechazado”.
Dando por
sentado que los docentes aceptarán la oferta -en el marco de la encuesta que
los gremios iniciaron ayer y culminarán el lunes en todas las escuelas
provinciales- Lacunza definió la última propuesta como “un fin de camino
salomónico, equilibrado, (algo) que podemos pagar y que obviamente implica el
sacrificio presupuestario de otras partidas, básicamente de obras públicas”.
Acerca de la
inédita extensión de la negociación, dijo que “no se nos prendió la lamparita
ayer (por el martes) y mejoramos la propuesta. Hace dos meses que estamos
trabajando en esto, antes de que empiecen las candidaturas y de que cierren las
listas”, enfatizó, en obvia respuesta al secretario general del Suteba, Roberto
Baradel, quien consideró que la mejora de la oferta está relacionada con la
“cercanía de la campaña electoral”.