Inyectan US$ 100 millones: Los Grobo venden el 75% de su grupo al fondo Victoria Capital

Después de un año de turbulentas negociaciones, cuando ayer a la madrugada, exactamente a las 3, se decidían a firmar los contratos; falló la impresora. Lo que parecía imposible sucedió: se habían quedado sin toner. El acuerdo que cambia la historia del grupo Los Grobo, uno de los principales jugadores en agronegocios, se concretó horas más tarde. Así las cosas, el
fondo Victoria Capital Partner les inyecta US$ 100 millones. Además, por una cifra no revelada, compran el 75% de una compañía que hoy factura US$ 550 millones, tiene 700 empleados, siembra 50.000 hectáreas, con Agrofina se introdujo en agroquímicos, con Frontec en sociedad con el INVAP están a la vanguardia de la agricultura de precisión, producen semillas, crecen en la elaboración de pastas y hasta financian con una sociedad de garantías recíprocas.
Victoria Capital se queda con la parte que aún conservaban en Los Grobo los brasileños de Vinci y la porción que pertenecía a Gabriela y a Andrea Grobocopatel. Gustavo y su otra hermana Matilde siguen como accionistas. Grobocopatel continurá siendo el presidente y Horacio Busanello, como CEO. “Permanece todo el equipo”, afirmó a Clarín el propio Grobocopatel.
La novedad en esta movida millonaria son los socios de Victoria Capital que logró sumar a la CFI, el brazo financiero del Banco Mundial, al banco holandés FMO y a la Universidad de Texas que por primera vez pone un pie en el país.
Victoria Capital, en cambio, ya tiene décadas entre nosotros. Este fondo, que es la continuación del conocido como DLJ, hizo su debut con la compra de Peñaflor el poderoso conglomerado vitivinícola, es accionista de Zucamor (envases de cartón) y de la productora de semillas Satus Ager. En 2011 se separaron del Credit Suisse, abandonaron el nombre DLJ y adoptaron el de Victoria, en honor a la única nave que sobrevivió la expedición de Magallanes. Con sedes en Nueva York, San Pablo, Bogotá y Buenos Aires, Victoria es inversor del constructor colombiano Corona, la editorial Santillana en España y Arcos Dorados, la franquicia de McDonald’s. El banco Itaú actuó en la operación.
-¿No temen un escenario negro tras el triunfo de Trump?
-Si en Argentina hay una industria competitiva y sostenible en el tiempo es la agroindustria. Somos un inversor financiero sin urgencia temporal. Tenemos muchos años por delante, dicen Carlos García y Santiago Cotter, socios de Victoria.
-¿Por qué venden parte del Grupo?, se preguntó a Grobocopatel.
-Buscamos aprovechar el momento político y económico. Nos genera una gran plataforma global con inversores de calidad. Hoy hay que estar en medio de los flujos del conocimento y del capital. No se puede crecer sin acceso al capital. Queremos que la compañía trascienda a la familia y a la Argentina.
 “Duplicaremos el tamaño en poco tiempo. El costo del dinero es parte de la competitividad. Se nos abre otro panorama”, añade Busanello.
Hacia delante, reforzarán a Los Grobo como líder en servicios que integra las necesidades del productor en un mismo lugar.
Uno de las primeros rubros a los que se asoman en esta etapa es el de las legumbres como la arveja amarilla, la lenteja canadiense y el garbanzo, que comenzaron a sembrar. “Puede ser un boom muy parecido al de la soja, con la India que demanda cada vez más este tipo de productos”, se entusiasmó Grobocopatel.

Clarin.comiEcoEconomía18/11/16