Cambio de timón: el trigo va por la calidad comercial e industrial

 La Jornadas demostrativas a campo permiten muchas veces anticipar desde lo más profundo del lote lo que más tarde demostrarán las estadísticas. En trigo, los productores argentinos están inclinándose masivamente hacia variedades con “garantías” de calidad comercial e industrial. Un anticipo de lo que se viene, en la jornada realizada por Tomás Hnos. en Pehuajó.

Mucho se dijo desde el cambio de gobierno sobre la apertura de las exportaciones, los nuevos mercados para el cereal y la quita de las retenciones. Mucho se habló de la importancia de la calidad en los envíos al exterior y de los requisitos y primas pagados por la industria. “Lo que no teníamos tan en claro era la reacción del productor argentino, que rápidamente viró hacia las variedades que le garantizan esas calidades”, explicó Sergio Degenhardt, coordinador de insumos de Tomás.
Esta fue una de las principales conclusiones de la Jornada a campo realizada por Tomás en Pehuajó, con la participación de Syngenta, Don Mario, Klein y Macro Seed: el productor privilegia la calidad por sobre los rindes abultados. Una decisión sabia, si se tiene en cuenta la posición del principal socio del Mercosur, Brasil, que ya había advertido sobre estos riesgos.
Vale recordar en este punto el mensaje de los compradores brasileños, que después de probar las virtudes de la calidad, dudaban sobre a quién comprar, más allá de las ventajas arancelarias que propone el Mercosur. Pareciera que no sólo Brasil, sino el mundo está pidiendo calidad y está dispuesto a pagar por ella.
Precisamente, el encuentro fue el marco ideal para un debate ente los más de 50 asistentes sobre el futuro del trigo: “Uno de los temas más importantes que se planteó fue la diferencia entre los grupos de calidad industrial y comercial. Hay un poco de oscuridad en el mensaje que le llega al productor sobre la diferencia entre ambos conceptos”, destacó el ejecutivo de Tomás.

Los ensayos


En la jornada a campo realizada por Tomás en Pehuajó, los productores pudieron ver en detalle el comportamiento de 11 variedades de trigo (6 de Klein; 2 de Don Mario; y 1 de Macro Seed/Inta). Una suerte de análisis FODA sobre lo que ofrece cada genética en su comportamiento en el oeste bonaerense.
La primera parada estuvo a cargo de Klein, que mostró sus dos nuevos productos: Lanza y Prometeo, los que van a estar disponibles el año próximo para el productor.
Lanza es un trigo con “excelente calidad comercial, con altos valores de PH y gluten”, según describió Félix Sanmartino. De ciclo corto y grupo de calidad 3, es una de las nuevas propuestas de la compañía para la próxima campaña.
Por su parte, Prometeo se destaca por su calidad industrial. De ciclo intermedio y resistente a vuelco, la variedad reemplaza al Proteo y viene a cubrir el segmento de trigos especiales.
Otra de las alternativas presentadas por la empresa fue el Klein Titanio CL, con tecnología Clearfield (un rasgo no muy común en el mercado argentino). Los ensayos de la empresa también mostraron la performance de otros productos ya presentes en el mercado, como Rayo, Serpiente y Liebre.
La segunda parada estuvo a cargo de Don Mario, que presentó sus variedades Cambium, Fuste, Algarrobo y Ceibo.
“De acuerdo a las estadísticas de venta de rótulo, Algarrobo fue la variedad más vendida en la presente campaña a nivel nacional. Este trigo se destaca claramente y esto está a la vista, más allá de su excelente comportamiento frente a roya”, destacó Rodrigo Iglesias, quien agregó la alta adaptabilidad de la variedad a la región.
En la tercera parada, Juan Lavagnino, de Macro Seed, presentó en sociedad el nuevo desarrollo realizado junto al INTA, el MS INTA 514. La variedad fue lanzada este año al mercado y nace a partir de un convenio de vinculación tecnológica del organismo nacional por 10 años, en el marco de su programa de mejoramiento de trigo, desarrollado en 8 experimentales a lo largo del país.
La última parada de la recorrida fue una suerte de mesa redonda organizada por Syngenta, a cargo de Fernando Murillo.
El especialista mostró las diferencias entre un lote testigo y otro tratado con Reflect Xtra, un fungicida de la familia de las carboxamidas. “A  la vista están las diferencias en un lote tratado y otro no”, dijo Murillo con un orgullo inocultable.
En la jornada, Syngenta también destacó la perfomance de su recientemente lanzado Miravis Dúo, el primer producto ADEPIDYN: una nueva molécula fungicida que pertenece a la clase química de las carboxamidas, que ofrece un control en enfermedades como manchas foliares, Septoria, Cercóspora, Alternaria y Venturia, y un excelente control de Oídio. La fórmula del Moravis se completa con un potente triazol: Difenoconazole.

El oeste y sus enfermedades


En el encuentro organizado por Tomás, la ingeniera agrónoma Rita Robledo, referente de la región, también dio un panorama del avance de las enfermedades en la región.
“Este año, a fines de septiembre y en la primera semana de octubre sólo se veía mancha amarilla. En la primera semana de octubre empezamos a detectar roya de la hoja y para finales del mes encontramos afectación de roya del tallo, una plaga bastante complicada”, reconoció la asesora privada.
“Sólo en algunos lotes también vimos roya estriada”, completó la especialista, dedicada a recorrer campos y detectar alertas tempranas para la compañía.

Un aporte al conocimiento


Al final de la jornada y cuando las empanadas amenizaban con la charla, Sergio Degenhart agradeció a los asistentes y comentó que “el objetivo de Tomás al momento de organizar estas jornadas a campo es estar presente en la agenda agrícola nacional, a través del aporte de conocimientos y experiencias técnicas para el productor”.
Los ensayos demostrativos “son claves para que el productor pueda ver cómo se comportan las variedades en su zona de influencia y llevarse herramientas para aplicarlas en el manejo”.
Una jornada a campo es un lugar de debate, un lugar de capacitación y un precioso espacio de intercambio, sobre todo en momentos donde el tema de calidad en trigo está empezando a involucrar a toda la cadena.
De hecho, la Cámara Arbitral de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires acaba de anunciar que realizará análisis gratuitos de calidad para que los productores puedan detectar partidas de trigo con alto valor comercial.

La entidad anunció recientemente que está dispuesta a hacerse cargo del costo del análisis de proteína y gluten para los productores de la provincia de Buenos Aires. El objetivo: elaborar un “mapa provincial de calidad de trigo 2016/17”.