En otro capítulo de una pelea que ahora se extenderá a la Justicia, el gobierno bonaerense demandó ayer a la provincia de La Pampa por la apertura del denominado “Tapón de Alonso”, una maniobra que podría provocar, en pocos días, la salinización del Río Colorado, con consecuencias negativas para los vecinos y productores del sudoeste bonaerense.
El gobierno
de Vidal realizó ayer la presentación de una acción
constitucional ante la
Corte Suprema, luego de agotadas las instancias de diálogo y negociación con
las autoridades de la provincia de La Pampa, que si bien se habían comprometido
“de palabra” a cerrar el tapón, no cumplieron con la promesa.
El Tapón de
Alonso se encuentra en una zona de bajos improductivos en La Pampa y tiene la
función de detener el curso de las aguas del Sistema del Desaguadero que, a
través del Río Atuel, cada diez años vierte naturalmente agua muy cargada de
sales en el Río Colorado.
“El Sistema del Desaguadero viene avanzando, y
si se encuentra el Tapón abierto, en unos 15 o 20 días puede llegar el caudal
de agua con altas concentraciones salinas al Río Colorado y perjudicar a los
vecinos y productores de Villarino y Patagones”, dijo en declaraciones a la
prensa el titular del Consorcio Hidráulico del Valle bonaerense del Río
Colorado, Sergio Urrutia.
Y si bien
celebró que el Gobierno provincial tomara cartas en el asunto, se mostró
preocupado por “los tiempos de la Justicia”. Es que según afirmó, “el último
registro salino fue de 1,40 milimol (mmol/l), lo cual significa que se está al
límite de los niveles normales, y podría duplicarse cuando llegue el agua en
caso de que no se tome una medida”, indicó.
Urrutia,
quien es productor rural en la localidad de Hilario Ascasubi, en Villarino,
estimó que el agua salinizada podría “arruinar un año de producción” en unas
160 mil hectáreas y generar graves problemas en las economías regionales del
sudoeste bonaerense, así como también perjudicar el agua para el consumo
humano.
El Día