Un fin de
semana donde los “chicos malos” hicieron de las suyas a troche y moche, apuñalaron
y se metieron en varias casas. Habíamos señalado que cerca de las 20 Hs. había sido el turno de
Don Carlos Boyero donde la alarma lo salvo de que le desvalijaran la casa, pero
el que no corrió con la misma suerte fue Antonio Zabala, quien había salido a
cenar con su familia y al regresar encontró la casa revuelta y le faltaban
varias cosas.
De acuerdo a
lo que nos narrara Antonio Zabala, ellos salieron de la casa, ubicada en Av.
Brown al 200, cerca de las 21:30 Hs. para cenar y regresaron alrededor de la1
de la mañana y al ingresar se encontraron con la casa revuelta con claros
signos de que le habían entrado a robar.
Él o los
ladrones ingresaron por el patio lindero y tras cortar una reja de su patio, forzaron
una puerta y se ganaron al interior de donde se llevaron un reloj, de un valor
importante, de acuerdo a los expresado por el damnificado y dinero,.
Lo peor de
todo es que le dieron vuelta cajones, muebles en busca de más cosas de valor.
“No es la
primera vez que nos pasó esto, parece ser que los Zabala estamos en la mira de
los ladrones”.
Según detallo
Zabala, los han estado vigilando porque tuvieron el tiempo suficiente para cortar
la reja, romper y entrar. La policía científica estuvo trabajando en el lugar y
les dijeron que ayer, por el sábado se la habían pasado prácticamente todo el día
en casares debido a los hechos que habían ocurrido.
Creer que este tipo de hechos delictivos obedece
solamente a que mucho buscan dinero fácil es no comprender cuál es el problema
de fondo por el que están atravesando nuestros jóvenes. Hay un flagelo que los
lleva a este tipo de hechos, pero al parecer nadie ve o no quiere ver. Cuando actúen
será demasiado tarde, si ya no lo es.