Lo que parecía
que algunas viejas prácticas, de la vieja política habían quedado en desusos,
ha vuelto a resurgir en estas elecciones.
En las PASOS fueron pasacalles de diferentes
partidos políticos, en esta oportunidad, en plena ciudad, destrozaron carteles
del FPCyS.
No importa
de qué partido, fuera, si destrozaran de otros la crónica seria igual, porque
por más que se destrocen carteles la gente tiene una idea, y no cambiara por un
cartel más o menos.
Seguramente, alguien o las cámaras habrán registrado algo y
por el bien de la convivencia local y el fortalecimiento de la democracia una
vez por todas dejen de lado las mezquindades políticas y que repudien este tipo
de actitudes.
Hoy es el
FPCyS, mañana quizás sea otro y en estos casos se deben unir por el bien de
todos.