La dirigencia de las patronales agropecuarias, a las que el presidente les pidió la sinceridad de que se digan parte de “Cambiemos”, desgasta al gobierno nacional. “Llevamos tres meses y parece que hubieran transcurrido tres años”, dijo el jefe de CARPAB (Matías de Velazco) después del encuentro del viernes en Olavarría.
Los patrones
rurales de La Pampa y Buenos Aires salieron a desafiar al gobierno nacional,
advirtieron que están pensando en un lock out y dejaron en claro que se niegan
a la distribución de sus riquezas que se planea mediante un nuevo mecanismo de
retenciones.
La voz de
alerta la dio el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de
Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Matías de Velazco, además en un contexto en
el que ya aparecieron algunos cortes de ruta en distintos puntos del país.
Desde la
Casa Rosada hicieron saber que la decisión de subir tres puntos los derechos de
exportación de la soja “es inamovible”.
Eso disparó
la reacción de de Velazco: afirmó que la entidad “sigue con la idea firme de ir
a un paro”, en referencia a un posible lock out (el paro es una herramienta y
derecho de reclamo que tienen trabajadores y trabajadoras; cuando los
empresarios se niegan a comercializar, por ejemplo, se le da a la medida esa
otra denominación).
Además, el
dirigente advirtió que esa medida de fuerza está prevista tanto “si suben las
retenciones” como si “las mantienen en el 30%”. La decisión la tomó el Consejo
directivo de la entidad, durante un encuentro que se hizo el viernes en
Olavarría.
Además, le
respondió al presidente Alberto Fernández sobre el vínculo de los productores
con Cambiemos. “A nosotros no nos opera nadie, ni Cambiemos ahora, ni ellos
cuando eran oposición”, dijo en una entrevista con La Red Rural, por Radio La
Red AM 910.
Opinó sobre
la relación con el Gobierno: “Ya se encuentra totalmente desgastada. Llevamos
tres meses y parece que hubieran transcurrido tres años”, aseguró.
El
ministerio de Agricultura negocia con la Mesa de Enlace la baja del tributo a
una serie de cultivos como girasol, arroz y maní, entre otros.
De Velazco
también rechazó esta posibilidad: “Si te suben las retenciones a la soja pero
te las baja al girasol, en definitiva el balance siempre queda a favor del
Estado que va acumulando más ingresos a sus arcas”, dijo en tono de queja.
Para el
dirigente, lo que “los políticos no entienden -no solo este Gobierno- es que
tienen que aflojar con el tamaño del Estado”.
“La Argentina ya probó muchas veces en solo
extraerle al campo y no ajustar el Estado, sino seguir agrandándolo. Eso nos llevó
a una crisis permanente y estructural de la Argentina. Tenemos que probar otra
receta”, presiguió.
Si bien la
idea de CARBAP es insistir con la propuesta de lock out a partir del martes,
día en que terminaría la negociación Gobierno-Mesa de Enlace, De Velazco dio su
visión sobre lo que debería suceder para evitar la medida de fuerza.
“Si hubiera realmente una señal, un programa
de reducción de retenciones lógico o una expresión del Presiente acerca de lo
nefasto y poco conveniente que son, se calmaría el ánimo de los productores”,
planteó.