La
resolución, que se oficializo hoy vía Boletín Oficial, retrasa el incremento
para el 1 de julio. Se iba a aplicar a partir del sábado próximo, aunque no
descartan que las petroleras, de todas formas, decidan elevar el precio de los
combustibles: alegan un retraso de entre 12% y 15% del valor.
Finalmente,
el aumento que se había decretado para el primer día de junio repercutirá un
mes después, el 1 de julio. "Eso ahorraría un 1,5%, del total de entre 3 y
4 por ciento que se había programado", indicaron desde la Secretaría de
Energía, por el impacto del Impuesto a los Combustibles Líquidos y al Dióxido
de Carbono, y a la inflación.
Según
trascendió entre los estacioneros, se preparaban para una remarcación cuyo piso
iba a ser del 3%: sumado al 13% de incremento que acumulan los combustibles
desde principios de año, llevaba la vara a alrededor del 16%, desde enero a
esta parte.
Según la
variación de los precios minoristas, el impuesto antes mencionado tendrá un
aumento del 11,8%, que se replicará en un alza del 1% en los importes en los
surtidores. Pero, además, habrá encarecimiento adicional por la inflación y la
devaluación del dólar frente al peso, que producirá una suba cercana al 3%
aunque, depende de la aplicación del impuesto, puede llegar al 3,5% o casi al
4%.
Por lo
pronto, el incremento existirá pero, por el momento, el Ejecutivo nacional
decidió que no fuera desde el primer día de junio.