Suicidio: Carlos Casares una comunidad enferma y las autoridades miran para otro lado

En nuestro distrito se registran un promedio de 5 hechos por año (en lo que va del 2019 ya son 6 los casos), cuando a nivel nacional se consideran elevados y preocupantes 7 suicidios cada 100 mil habitantes. Casares (partido) posee poco más de 23 mil. Mientras  y falta de respuestas es una constante desde Salud y el Municipio, seguimos sorprendiéndonos cada vez que alguien se quita la vida. HAGAN ALGO POR FAVOR.


Es el drama más silencioso, del que nadie quiere hablar, o miran para otro lado, el suicidio, se lleva la vida de  más de 500 adolescentes cada año en la Argentina. Ya es la segunda causa de muerte por causas violentas en pre adolescentes,  adolescentes y jóvenes  y la problemática va en aumento. Desde los 90 hasta la actualidad la tasa de suicidios en jóvenes se triplicó en el país (pasó de 2,5 por cada 100 mil habitantes a 7,4 cada 100 mil), según advierte el reciente informe “Situación de la salud de los y las adolescentes en Argentina” elaborado por el Ministerio de Salud de la Nación y Unicef sobre la base de estadísticas de organismos del Estado.
El índice de mortandad por suicidio en Argentina para el año 2015 según datos oficiales fue de 7,4 defunciones por cada 100.000 habitantes, que sigue siendo altísimo. Si bien es cierto que las cifras sobre suicidio deben ser tomadas con cautela ya que, como bien señala la Organización Mundial de la Salud, podrían estar subestimadas, los datos sucesivos aplicando una misma metodología deberían indicar al menos la tendencia.

Casares una comunidad enferma


En nuestra comunidad, que posee algo más de 23 mil habitantes en todo el partido, la tasa de suicidios es extremadamente elevada, ya qque si hacemos un caculo frio, teniendo en cuanta los datos señalados al principio de la nota, en nuestro distrito, no se deberían contabilizar  más de 3 casos cada dos años, pero el promedio es de 5 hechos por años; lo que señala y habla de una sociedad con un grave problema, que si bien se están dando en jóvenes, también se producen en personas adultas y mayores.
Es verdad que la sociedad no es la misma que décadas atrás, que se vive de manera más conflictiva, familias ensambladas, hay mayor violencia, pero no siempre piden ayuda y cuando lo hacen es tarde.
Cada vez que se produce un suicidio, y si se trata de jóvenes la consternación es mayor por parte de la gente, pero no se ve una preocupación por parte de las autoridades municipales, en especial desde salud.
Hace poco más de tres años en una reunión realizada en un establecimiento educativo de nuestro medio por parte del grupo de profesionales que “ayudan ante esta problemática”, al ser consultados sobre estadísticas que habría en Casares, la respuesta fue que no se tenían.
Algo fundamental para poder comprender si son hechos fortuitos o debería trabajarse al respecto debido a la cantidad registrados.
Si no se conoce la cantidad de casos, no hay estadísticas, contención para las posibles víctimas y familiares ¿Realmente se puede trabajar en la solución o al menos tratar de evitarlos?
Si el tema por lo complejo desborda las posibilidades de poder resolverlo desde lo local, el pedir colaboración a estamentos provinciales no es pecado. Comunidades con problemáticas similares solicitaron ayuda y tuvieron respuesta.
 ¿Qué esperan, que se sigan perdiendo vidas para actuar? Hagan algo por favor, no sea cosa que sea demasiado tarde.