La
modificación de la ley 11.825, que a partir de la última temporada permitió en
todo el territorio provincial la venta de bebidas alcohólicas hasta las 23, dos
horas más del tope
nocturno que rige para almacenes, supermercados y otras
bocas de expendio, volverá a las 21 a partir de mayo.
La
iniciativa que generó cierta polémica aunque era reclamada por comerciantes de
localidades turísticas, había comenzado a regir desde diciembre pasado con un
plazo de cinco meses, por lo que desde mayo el horario para la venta de alcohol
regresará a las 21.
Con el apoyo
del Gobierno de María Eugenia Vidal, el ajuste buscó atender un reclamo
histórico de los comerciantes que se sentían perjudicados por esta restricción
que consideraban excesiva, y de residentes y turistas que durante el verano
debían apurar el regreso de la playa si es que querían llegar a tiempo para
comprar una botella de alcohol.