Carlos Borla: "Hay mucha gente que está mirando nuestro sector"

El presidente de Tomás Hermanos dice que hay interés de inversores extranjeros en el agro argentino


Pasar de ser una compañía eminentemente familiar a una profesional es un desafío para la mayoría de las empresas agropecuarias del país. Tomás Hermanos, con más de 100 años, logró atravesar ese
proceso. Recientemente anunció una inversión de tres millones en sus instalaciones de acopio en Trenque Lauquen. En una entrevista con LA NACION, el presidente de Tomás Hermanos, Carlos Borla, se refirió a los cambios y a las perspectivas del negocio agropecuario.

-¿Cómo fue el proceso del cambio en la empresa en los últimos años?
Hace 15 o 16 años empezamos a imaginarnos cómo iba a seguir nuestro negocio. Veníamos de los años finales de los 90 con precios muy bajos de las commodities, sin retenciones, con tasas de interés altas acá y a nivel mundial. En nuestra zona, Carlos Casares, teníamos inclemencias climáticas que nos hacías preguntar por la sustentabilidad de la empresa. Primero pensamos en la incorporación de cuadros lo más profesional posible en cada una de las áreas. Y luego, incorporamos jóvenes. Entonces yo tenía poco más de 40 años y tomamos gente diez o doce más jóvenes para que ellos crecieran y nosotros aprovecháramos la etapa más fructífera, de los 40 a los 60 años.

-¿Qué otra decisión tomaron?
El segundo punto fue el de expandirnos geográficamente. El estar concentrados en un solo lugar nos daba cierta vulnerabilidad. Eso nos llevó a crecer a la zona noroeste de la provincia de Buenos Aires. El origen del acopio lo seguimos manteniendo, somos originadores de mercadería. Estamos comercializando un millón de toneladas en todos los granos (soja maíz, girasol, trigo y cebada). A su vez somos proveedores de insumos para la producción, con ventas anuales por 40 millones de dólares. Y hacemos siembras asociadas, con 15 .000 a 20.000 hectáreas por año. Lo hacemos en campo de terceros. Renegamos un poco del modelo de alquiler puro, queremos darle sustentabilidad y persistir en el tiempo con asociaciones con el dueño de la tierra.

-¿Por qué?
Creemos que modelo de "dame tu campo, te pago tanto y el año que viene no sé si lo tengo" no nos permite hacer una agricultura más sustentable para el dueño de la tierra, la tierra y nosotros. Buscamos la variabilización. ¿qué digo con esto? Si me va muy bien, al dueño de la tierra le va a ir mucho mejor por haberlo alquilado por una suma fija. Si el año es un poco duro, los dos no vamos a tener los resultados que estábamos esperando. Tratamos de convencer al dueño de la tierra que vayamos tanto por precio o por volúmenes de producción que tengamos. Eso nos da sustentabilidad para no tener sobresaltos y tener resultados. De hecho el modelo de los grandes pooles ha ido desapareciendo.

¿Son contratos de corto plazo?
No, plurianuales, acuerdos que se van renegociando en función de precios. No vamos a tener resultados espectaculares, pero nunca vamos a tener un resultado significativamente adverso.

-¿Con eso les fue mejor que a los grupos de siembra?
-Sí, definitivamente.

-¿Con qué criterio producen?
Queremos ser un modelo a seguir en las zonas donde operamos para que sea algo atractivo para aquel productor que se quiera acercar y que no sólo pide condiciones comerciales sino también agronómicas. Aplicamos agricultura por ambientes, fertilización variable, siembra de precisión y el manejo de drones. Todo lo que sea sustentable y rentable para ambas partes.

-¿Hay trabas para producir en el país?
Sí, de infraestructura y burocráticas. La cantidad de pasos necesarios para despachar un camión al campo es mayor que para inscribir un auto en el Registro del Automotor. Forma parte del costo argentino. De todas formas, nuestra responsabilidad como empresarios es seguir invirtiendo en logística y comunicaciones y darle una mirada de valor agregado a las materias primas.

-¿Hay posibilidades de que ingresen inversores externos al sector?
Sí, no me cabe duda. Hay mucha gente que está mirando a nuestro sector. El campo genera un flujo de dólares y eso tiene una estabilidad en sí mismo. Es el sector que dio una respuesta y tiene mucho más para dar. El Gobierno tiene "sintonías finas" para llevar adelante.

Fuente: La Nación