La muerte súbita es el deceso de una persona de manera inesperada, independientemente de su edad y en ausencia de signos o síntomas de algún problema médico.
"Si
tenemos en cuenta que la mitad de los pacientes que presenta muerte súbita tuvo
síntomas premonitorios, eso quiere decir que el cuerpo en cierta forma dio
avisos. Sin
embargo, eso no ocurre en la mayoría de los casos sino
fundamentalmente durante la práctica de deporte, cuando es más común que
aparezcan desmayos, palpitaciones o dolores en el pecho", señaló a Télam
Moltedo.
El también
coordinador de Electrofisiología Pediátrica de la Clínica y Maternidad Suizo
Argentina enfatizó que "esos signos de alerta, aparezcan cuando se está
haciendo ejercicio o no, son suficientes para realizar una consulta inmediata
con el especialista".
En el mundo
mueren 17 millones de personas a causa de afecciones cardiovasculares y el 10
por ciento corresponde a muerte súbita, casos que suelen duplicar a los decesos
por sida, cáncer de mama y de pulmón.
"Si
bien los episodios de muerte súbita son mucho más frecuentes en adultos, en los
últimos años hubo varios casos en deportistas jóvenes que tuvieron repercusión
en los medios", recordó Moltedo, quien señaló que en cambio la incidencia
de muerte súbita en niños oscila entre uno y seis chicos por cada 100.000 al año
y que la mayoría de las veces se da entre el nacimiento y los 18 años.
El
especialista apuntó que la incidencia es por lo general mayor en pacientes de
hasta 35 años, "porque luego de esa edad las patologías están más
relacionadas con la vejez".
"La
causa de muerte súbita más frecuente en niños son los problemas cardíacos, que
pueden ser catalogados en distintos tipos, como por ejemplo un engrosamiento
anormal del músculo cardíaco que se llama miocardiopatía hipertrófica y
conlleva riesgo variable", dijo.
Moltedo
comentó que muchas veces la muerte repentina se da en personas con corazones
estructuralmente normales que no tienen problemas musculares ni vasculares
visibles ni nada microscópicamente visible pero que sí tienen trastornos
eléctricos primarios.
"Lo que
lleva a la muerte es una arritmia muy rápida de los ventrículos que se llama
fibrilación ventricular, causada por defectos en los impulsos eléctricos y que
genera la muerte independientemente de la causa subyacente", explicó.
Agregó que
otra de las patologías que puede generar muerte súbita son las cardiopatías
congénitas, por lo que antes de realizar deportes de alto rendimiento hay que
hacerse un chequeo médico completo.
"Algunos
creen que la realización de un ecocardiograma y un electrocardiograma son un
cheque en blanco para que no les suceda nada malo, pero los métodos de
screening tienen limitaciones, por lo que la muerte súbita puede ocurrir aunque
esos estudios hayan dado bien", remarcó Moltedo.
El
especialista destacó además la importancia de la capacitación en Reanimación
Cardiopulmonar (RCP), que ayuda a prevenir y evitar estos episodios.
"Podemos
hacer mucho más para prevenir los resultados fatales frente a los episodios de
la muerte súbita. Lo principal es que la gente se capacite y certifique en RCP
para que tanto en la calle como en cualquier sitio puedan asistir al paciente
de forma urgente", dijo.
Recordó que
un minuto de demora en la atención significa un 10 por ciento menos de chances
de sobrevida, por lo que "la intervención rápida puede salvar a las
personas en un 90 por ciento de los casos".
"Debemos
recordar que el 50 por ciento de los pacientes que tienen muerte súbita
extrahospitalaria son por infarto agudo de miocardio y que de ese porcentaje,
más del 90 por ciento no llega a tiempo al hospital. Por eso insistimos en la
atención primaria urgente cuando el hecho ocurre fuera de una institución
médica, donde son los eventuales testigos quienes deben llamar de inmediato al
sistema de emergencias y tratar de mantener al paciente con vida mediante las
técnicas de RCP", explicó.