En las escuelas públicas de la región: El 70% no termina la secundaria a tiempo

El dato fue difundido esta semana y surge de relevamientos oficiales. Tomando estatales y privados, sólo completa la enseñanza media el 38% de los alumnos.

Cuando aún resuenan los ecos por la controversia desatada en los últimos días en torno al Plan Fines, que obligó a la gobernadora electa María Eugenia Vidal a salir a aclarar
que no eliminará el programa, esta semana la calidad y los tiempos de la enseñanza media volvieron a quedar bajo la lupa luego de que se conociera un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) según el cual sólo el 38% de los chicos argentinos logra terminar la secundaria a tiempo.
El informe, realizado en base a datos del propio Ministerio de Educación de la Nación, se torna más inquietante si se analizan por separado las cifras de la educación pública. En concreto, se precisa que entre los que asisten a escuelas privadas el 59% la termina en tiempo. Pero entre los que concurren a las escuelas estatales, apenas el 31% termina su cursada en los plazos que corresponden.
Si bien aumentó la escolarización en la última década -algo para lo que la Ley de Educación fue clave-, “no alcanzó para modificar la forma de enseñanza y romper el núcleo duro de exclusión”
“Estos datos muestran que la mayoría de los adolescentes tiene problemas para terminar la educación media -señalan los hacedores del trabajo-. Prácticamente 6 de cada 10 jóvenes no termina la secundaria a tiempo. El problema es mucho más intenso entre los alumnos de las escuelas estatales que, en general, es donde concurre la gente de menores ingresos. En los establecimientos estatales 7 de cada 10 adolescentes se retrasan o no terminan la secundaria. Es evidente que la principal barrera que enfrentan los adolescentes argentinos para acceder a la educación superior es que no terminan en tiempo la secundaria”.
Consultadas por la situación en nuestra provincia, las autoridades de Idesa aclararon que, si bien se trata de datos nacionales, “los datos del país son muy representativos de lo que ocurre en la provincia de Buenos Aires, donde, por una cuestión poblacional, los promedios estadísticos son históricamente coincidentes con los números que se tienen en el total del país”.
Con todo, encontrar cifras o voces oficiales en la Provincia que expliquen estos datos no resulta sencillo. Pese a los intentos de este diario por obtener alguna una declaración ante el informe de Idesa, desde la cartera educativa bonaerense se prefirió mantener silencio.

Sin solución


Los datos difundidos por Idesa entran en sintonía con los brindados no hace mucho por la Unesco, según los cuales el secundario concentra el mayor porcentaje de abandono educativo de la población argentina. Pese a que ese nivel es obligatorio desde 2006, cuando se sancionó la Ley de Educación, la deserción es un problema aún sin solución en el país y, según las últimas cifras, la tasa de abandono interanual llega al 15,8%.
Claro que, hay que decir, en los últimos diez años la matrícula del nivel medio creció un 12,6%, lo que significa que se sumaron 428.618 alumnos nuevos. Sin embargo, queda claro, que ingresen más chicos no significó que hayan permanecido en los colegios.
Esta cifra surge del informe de la Unesco Global Education Digest, de 2010, en el que se afirma que la Argentina es uno de los países de la región con más baja tasa de graduación en el secundario: sólo un 43% de los estudiantes secundarios de nuestro país, de acuerdo a este organismo internacional, culmina sus estudios en los plazos establecidos. Y sólo un 50% del total de estudiantes secundarios accede a ese título.
El país se ubica así detrás de Perú y de Chile, con un 70% de alumnos que completan sus estudios secundarios; de Colombia (64%); de Bolivia, (57%); de Paraguay (50%), y de Ecuador (48%).
“Se promete gratuidad y eximición de exigencias académicas para acceder a la universidad cuando una enorme proporción de jóvenes, especialmente los más pobres, tiene el acceso vedado por la mala calidad de la educación básica -sostienen en Idesa-. Apenas el 12% de los egresados de la educación superior integran los hogares pobres, mientras que más de la mitad se ubican en los tres deciles de mayores niveles de ingreso que, en su mayoría, egresaron de escuelas de gestión privada”.

En cuanto a la repitencia, concretamente, uno de cada 10 estudiantes secundarios repite el año. Las mayores dificultades, según quienes analizan esta problemática, están en el primer y segundo año, donde la repitencia trepa hasta el 15%. A medida que avanza la escolaridad, la cantidad de alumnos que repiten desciende: el promedio de los últimos tres años ronda el 6,7%. Según el último dato oficial disponible, la repitencia en secundaria es del 11,81%. Diez años antes era el 8,31%. Este leve incremento se dio en paralelo con un aumento de la matrícula del nivel medio, que creció un 14,2% entre 2003 y 2013, según el último informe del Centro de Estudios de la Educación Argentina, de la Universidad de Belgrano. A todo esto, claro, cabe decir que la repetición en el colegio secundario no solo demora las trayectorias escolares de los adolescentes sino que, en muchos casos, se convierte en el paso previo a la deserción, como queda a la vista uno de los problemas más críticos de la secundaria en el país.