Hace un par de semanas dábamos cuenta del accidente de un mujer que se cayó de su moto como consecuencia de haber agarrado los pozos que estaban en el pavimento frente al Molino (hoy están reparados), la que debió ser intervenida quirúrgicamente debido a sus lesiones. En dicha ocasión destacábamos también otros cráteres que había en diversas zonas de la ciudad, los cuales muchos de ellos fueron tapados.
Hoy lamentablemente debemos señalar que una mujer, Silvia Falciglia, tal cual relata su
hermana Ana María, se topó con uno de los tantos pozos que existen en la vía publica (pavimento) y dio con su cara contra el suelo, debiendo ser trasladada al hospital donde la suturaron y le aplicaron 4 puntos.
Lamentablemente las calles de pavimento de la ciudad se han transformado en un verdadero peligro, en algunos casos porque ABSA rompe para arreglar alguna perdida, tapan el pozo con tierra y con el devenir de los días esta se sale y queda el cráter. Otros lugares por efecto de las altas temperaturas se levanta el pavimento, incluso hasta 10 centímetros sobre la otra placa siendo un cazabovos interesante.
La brea se sale, o directamente nunca la tuvo y una bicicleta o moto con rodado fino si cae su reda en esa zanja es probable que termine en el piso. Y después el deterioro lógico del paso del tiempo.
Un funcionario actual, de alta jerarquía, en época de campaña política dijo (es cuestión de buscar archivos fílmicos, o escritos), que “el municipio no solo debe hacer nuevas cuadras de pavimento sino mantener y reparar las existentes”. Bueno, es un lindo momento para poner en práctica esa frase para que deje de ser una simple proclama electoralista y se transforme en realidad, caso contrario seguiremos teniendo “accidentes” por negligencia de quienes deben realizar estas tareas.
