La empresa centenaria inauguró la semana pasada su Campo Tecnológico Tomás (CTT), un espacio especialmente pensado para probar, capacitar y difundir conocimientos claves para el agro que se viene. La premisa: aumentar la productividad de manera eficiente, sustentable y en armonía con el medio ambiente. AAPRESID y el INTA apoyaron la iniciativa.
En un predio ubicado a 3 kilómetros de Carlos Casares, Tomás Hnos.
refuerza su autoconcepción de ser “líderes en multiservicios para el agro” y
redobla la apuesta con una iniciativa focalizada en la transferencia de
conocimientos hacia el productor, los jóvenes y la comunidad en general.
“El CTT es un nueva demostración de este gran compromiso que tiene
Tomás hacia el sector agropecuario, porque producir de una u otra manera no es
lo mismo y marca la diferencia entre hacer las cosas pensando sólo en el
presente o armar un esquema productivo sustentable y a largo plazo, preservando
los recursos”, aseguró Carlos Borla, presidente de Tomás Hnos., ante un
centenar de productores que participaron de la jornada de inauguración.
Ubicado sobre la ruta 50, a 3 kilómetros de Carlos Casares, en las
72 hectáreas del CTT se testearán las últimas tecnologías y prácticas en
Agricultura de Precisión: drones, mapeos satelitales, mediciones, balance de
nutrientes, fertilización y siembra variable, ambientación de lotes por
capacidad productiva y balance de nutrientes, entre otras innovaciones
aplicadas sobre los más recientes adelantos en semillas.
“El objetivo es mostrar que se puede incrementar la producción, sin
afectar el recurso tierra y teniendo en cuenta la variable social y ambiental,
más allá de la económica”, explicó Sergio Degehardt, coordinador del CTT y
líder del área de Agrotecnología Aplicada de Tomás.
Para llevar adelante esta tarea y hacerla crecer a lo largo del
tiempo, Tomás convocó a empresas ligadas a las AgTech e instituciones, como el
INTA y AAPRESID a que se sumen a la iniciativa.
“Tomás quiere posicionarse como facilitador en el proceso de
funcionamiento en red de empresas e instituciones públicas y privadas que
trabajan en la difusión y adopción de buenas prácticas”, remarcó Yari Murature,
subgerente general de la compañía.
La Jornada inaugural
La jornada se desdobló en dos tipos de actividades: bien temprano,
en la Sociedad Rural de Casares, el coordinador del Proyecto Específico
Tecnologías de Agricultura de Precisión del INTA Manfredi, Fernando Scaramuzza,
brindó un panorama sobre el agro que se viene.
El especialista detalló que lo próximo en agricultura de precisión vendrá de la mano de la automatización, la autorregulación de la maquinaria agrícola, la robótica, la telemetría para el procesamiento de datos georreferenciados y la gestión de la información a través de plataformas inteligentes. Todo esto apuntado a la generación de productos de alto valor agregado.
En esta línea, la capacitación y transferencia de conocimientos será
clave para formar a los profesionales que trabajarán con estas innovaciones en
pos de garantizar la sustentabilidad del sistema.
“Resulta clave garantizar la seguridad alimentaria, para lo cual hay
que ser eficientes en la producción de materias primas. Por ello, apoyamos este
tipo de iniciativas y felicitamos a empresas como Tomás, que apuestan no sólo a
la experimentación sino a la capacitación de recursos humanos, sobre todo de
los proyectos agrotécnicos destinados a los jóvenes”, destacó Scaramuzza.
La Jornada continuó en el CTT, donde los productores recorrieron
ensayos de soja y maíz y se interiorizaron sobre las últimas tecnologías y
prácticas en Agricultura de Precisión, de la mano de empresas como Geosistemas,
Precision Planting, Bonnter, Solum, y Agora Soluciones Agropecuarias.
Pero antes de escuchar los detalles de cada una de estas propuestas,
AAPRESID tomó la palabra en la voz de Rocío Belda, coordinadora del área de
Agricultura Certificada, para volver a concientizar a los productores sobre la
importancia de la certificación de procesos productivos en buenas prácticas.
“Para nosotros, empresas como Tomás Hnos. son grandes aliados en la
implementación de certificación de procesos productivos que conllevan buenas
prácticas. Debemos poder mostrar a todos, a la comunidad y a nuestros
compradores que trabajamos de manera transparente y sustentable”, aseguró Belda.
Mientras disfrutaban de un lomito a campo, la opinión de los
productores sobre el CTT se concentraba en los dichos de Cesar Matuttis,
ingeniero agrónomo, asesor y productor de la zona: “Me gustó mucho la idea, es la manera que Tomás nos va
permitir acceder a las últimas tecnologías en precisión. Es un hermoso campo
experimental que lo tenemos que aprovechar”.
Prensa Tomas Hnos.