Fue en su último ejercicio. La compañía incorporó un nuevo socio que le inyectó US$ 100 millones.
Aunque el
futuro esté teñido de optimismo, el presente le está jugando una mala pasada al
grupo los Grobo, uno de los líderes en los negocios del campo. El último
viernes informó a la Comisión Nacional de Valores una pérdida de $ 559
millones.
La cifra
corresponde centralmente al pago de intereses de una deuda que el propio
Gustavo Grobocopatel, presidente de Los Grobo, definió ayer a Clarín como
enorme y de la que están saliendo gracias a la capitalización de la compañía de
la mano de sus nuevos socios, el fondo Victoria Capital que le inyectó US$ 100
millones.
La deuda de
los Grobo alcanzó 180 millones de dólares con intereses elevados, “que nos
estaban haciendo inviables pese a que los resultados operativos son favorables.
Esto se corrigió con el ingreso de un socio global como Victoria Capital y la
capitalización de la empresa”, dijo Grobocopatel. La millonaria pérdida
corresponde al último ejercicio anual que cerraron el pasado 30 de junio,
cuando vivieron tiempos ásperos.
No solo por
las inundaciones, que afectaron su producción. El clima también dañó las ventas
de su controlada Agrofina, dedicada a herbicidas, protectores de semillas,
fungicidas e insecticidas, entre varios insumos de última generación.
Hubo otros
hechos inesperados, como la caída de los precios de esos productos que, aún
así, no alcanzaron para que los agricultores reaccionen e incrementen su
demanda.
Acostumbrado
a nadar contra la corriente, Grobocopatel sostiene que “las empresas están
pagando el costo del gradualismo. El hecho de que no se mueva el tipo de cambio
y absorber los costos inflacionarios nos pega, pero nuestra historia siempre
fue de rosas y espinas. Estamos acostumbrados a manejarnos en mercados con
mucha competencia”.
Los Grobo
facturarán en este ejercicio US$ 600 millones y en esa suma, Agrofina
contribuye con ventas por US$ 125 millones. Comercializarán 2 millones de
toneladas de granos. Emplean a 700 personas de manera directa. Eso sí,
cambiaron la manera de trabajar la tierra. Están sembrando el récord de 90.000
hectáreas en la Argentina con la modalidad de siembra asociada. Esto es un
contrato con el dueño del campo con el que van a porcentaje, en vez de pagar un
alquiler pleno.
Victoria
Capital ingresó a Los Grobo en 2016 con la compra del 75% del paquete. Gustavo
y su hermana Matilde quedaron con el 25%. El fondo, cuya cabeza visible es
Carlos García, es inversor en el grupo constructor colombiano Corona, la
editorial Santillana en España y Arcos Dorados, la franquicia de McDonald’s. En
Los Grobo desembarcó con la CFI, el brazo financiero del Banco Mundial,el banco
holandés FMO y la Universidad de Texas en la que fue su primera incursión en la
Argentina.
Diario
Clarín (Economía)