Se evidencian problemas tanto de exceso como de déficit de agua, que provocan un impacto negativo en el ciclo agrícola
En la actualidad se están registrando en la región pampeana condiciones
hídricas muy contrastantes, producto de las marcadas diferencias en
precipitaciones ocurridas desde el inicio del período 2016/17.
Desde el fin de la campaña pasada, se destacan dos zonas con más de 300
milímetros por encima de lo normal: el centro de la región pampeana que incluye
el sudeste de Córdoba, el noroeste de Buenos Aires, el sur y el centro-este de
Santa Fe y el oeste de Entre Ríos. Éstas contrastan marcadamente con el sur de
la provincia de Buenos Aires, con alrededor de 200 y 300 milímetros por debajo
de lo normal.
Según un relevamiento de los Consorcios Regionales de Experimentación
Agrícola (CREA), realizado en los últimos cinco días, las zonas del Movimiento
más afectadas por los excesos hídricos se encuentran en las regiones Centro y
Santa Fe Centro.
Según describe AACREA, en la primera zona mencionada, en promedio el 30
por ciento del área de granos gruesos está perdida. Asimismo, el informe
destaca una gran variabilidad en el impacto dentro de la zona, con empresas que
llegan a más del 70 por ciento del área perdida. Además, se estima que un 15
por ciento del área se encuentra bajo riesgo latente de pérdida adicional
dependiendo de cómo evolucionen los fenómenos climáticos.
Por otro lado, en el centro de la provincia de Santa Fe se calculan
pérdidas que promedian el 20% de área de granos gruesos y de recursos
forrajeros mientras que si persisten las condiciones climáticas desfavorables
corre riesgo el 35% del área total. En las últimas 48 horas, las lluvias
persistentes continuaron en dicha región. Cabe aclarar que, dicha zona es la de
mayor potencial de pérdidas de las relevadas y que, además, viene de sufrir una
situación similar durante el otoño pasado.
En menor medida, pero también con pérdidas y riesgos de daños en
cultivos de verano y recursos forrajeros se encuentran las siguientes zonas
CREA: Oeste, Sur de Santa Fe, Norte de Buenos Aires y Oeste Arenoso. Por otro
lado, queda alguna área sin sembrar por imposibilidad de realizar labores. El
sondeo considera que existen grupos CREA con más del 30% del área de maíz sin
sembrar.
Escasez de agua
En las regiones Semiárida, Sudoeste y Mar y Sierras, el déficit de
lluvias comenzó afectando parte de la cosecha fina y continuó condicionando la
implantación y el normal crecimiento de los cultivos de verano. Tal es el caso,
por ejemplo, del grupo CREA Necochea-Quequén que parte de la soja de segunda no
pudo sembrarse y se encuentra limitado el crecimiento y el desarrollo de los
granos gruesos.
Incendios
En La Pampa y en el sudoeste de la provincia de Buenos Aires, las
sequías contribuyeron en los incendios registrados en los últimos días.
Técnicos CREA de la zona Semiárida estimaron daños que en casos particulares alcanzan
al 50% de los recursos forrajeros naturales.
Por exceso o por déficit, las condiciones observadas provocaron una
pérdida de producción, tanto por área como por rinde pero también daños en la
infraestructura (alambrados, caminos, mangas, galpones, animales, etc.)
necesaria para el desarrollo de las actividades agropecuarias.
Consecuencias
La evolución de las condiciones meteorológicas en las próximas semanas
definirá la magnitud final de los daños. A pesar de la compleja coyuntura, el
productor CREA tiene la intención de avanzar con la siembra en las áreas que no
llegaron a implantarse y de resembrar, al menos parte de lo perdido. Es
menester aclarar que todo dependerá de lo que ocurra en los próximos días en
virtud de que la ventana de siembra está llegando a su fin en algunas de las
regiones anteriormente mencionadas y las que puedan lograrse por la fecha
tardía de implantación, serían cultivos de alto riesgo.
Este primer relevamiento contó con la participación de 42 técnicos CREA
distribuidos en las regiones más afectadas aunque se realizará un nuevo sondeo,
con mayor detalle, en la próxima Encuesta SEA-CREA de marzo.