El precio de la carne había aumentado hasta 16% en diciembre cuando la hacienda en pie cotizó en alza, pero no hubo correlato ahora que los valores en el mercado descendieron.
A pesar de
que el precio de la hacienda cayó 20% en el Mercado de Liniers en los últimos
días, en la red de distribución de carnicerías y supermercados esa baja no
llega, advirtió hoy la Sociedad Rural.
El precio de
la carne había aumentado hasta 16% en diciembre cuando la hacienda en pie
cotizó en alza, pero no hubo correlato ahora que los valores en el mercado
descendieron.
La Rural
sostuvo que "en los últimos días el precio de la hacienda en pie en
Liniers cayó aproximadamente el 20%, y aún más en muchas ferias del interior,
pero no vemos que el valor de la carne baje en la góndola en la misma
proporción". La entidad explicó que en diciembre la carne "siempre
tiene una suba estacional debido a la demanda por las fiestas, el cierre de
frigoríficos por vacaciones, los feriados, y el cambio de expectativas conocido
por todos". "No es justo que el consumidor esté pagando de más por el
abuso de ciertos eslabones de la cadena.
Aspiramos a
que las carnicerías, supermercados y distribuidores sean responsables y
retrotraigan los valores como corresponde", advirtió la Rural. La entidad
apeló al "sentido común" y solicitó que "al igual que cuando
sube la hacienda en Liniers y se refleja en el mostrador, cuando ésta desciende,
bajen los precios de la carne".
"Entendemos que todos los integrantes de la
cadena de valor de la carne deberían contribuir para que el consumidor pague un
precio justo. Pese a la baja del precio de la hacienda, la carne sigue cara
para el consumidor", añadió. Por su parte, Dardo Chiesa, presidente de
Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), señaló que "cuando sube la
hacienda la cadena comercial aprovecha para recomponer sus precios".
"La hacienda sube y luego baja, como ocurre ahora, pero la carne en la carnicería
no. Esto viene de la mano de los costos, que no tienen que ver estrictamente
con la carne, como los servicios, las paritarias y el transporte",
consideró. El dirigente señaló que "si uno analiza el precio de la carne
en el mostrador, el porcentaje de remarcación está muy por encima de lo que se
da en tiempos normales. Evidentemente se ha remarcado para recomponer una
situación que no tiene nada que ver con el precio de la hacienda en pie".
Ante esta situación, el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, se había
mostrado confiado en que iba a haber rebajas en la carne significativas pero
esto no ocurrió. El funcionario dijo que el Estado intervendría y autorizaría
la importación de carne, una medida que según la vicepresidenta Gabriela
Michetti está "en estudio". En tanto, Miguel Schiariti, presidente de
la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra), dijo que el precio
de la carne debería haber bajado por lo menos un 5% respecto de los valores de
diciembre. Schiariti consideró que el incremento de la hacienda y el
consecuente aumento de la carne hacia fin de año fue el resultado de factores
estacionales y macroeconómicos. Explicó que por un lado, siempre se reduce la
oferta de hacienda en diciembre porque el productor cierra su año fiscal y
también ocurre que los supermercados presionan el precio en Liniers por el
volumen de compras que hacen para abastecer el consumo durante las fiestas de
fin de año. Por su parte, se estima que el ganado en pie cayó 17% desde su pico
de diciembre, pero el precio en góndola subió entre 14 y 16%, y se puso en una
meseta. Chiesa, en tanto, se mostró descreído: "Nunca vi que baje el
precio de la carne en el mostrador. La hacienda bajó 5 ó 6 puntos. Este precio
de la carne debería bajar, en la medida en que se restrinja el consumo, claro.
Siempre la que tiene la sartén por el mango es ´Doña Rosa´".