
Al parecer el malhechor abrió la ventana que da a la Avenida y a pesar de estar la reja,
pudieron sortear el inconveniente (se presume que puede haber sido algún nene o
una persona muy chiquita), ingresaron al local y se llevaron unos 300 pesos que
estaban en la caja registradora.
Lo llamativo
del hecho es que las ventanas están todas enrejadas y a pesar de ello pudieron
ingresar igual. Al parecer solo se llevaron esos pocos pesos.
Cabe señalar
que hace unos meses le había roto el vidrio del mismo ventanal por donde
ingresaron con un cascote.
No provocaron
daño alguno, solo ingresaron se llevaron el dinero y salieron por el mismo lugar.