Lapicera mata lancha: Scioli y el regalo de 30 mil pesos

El Senador Gustavo De Pietro (UCR) le solicitó al gobernador Scioli y candidato presidencial del FPV “que devuelva la lapicera que le regaló su par de Chubut, Martín Buzzi”. El legislador, autor de un proyecto de ley que regula los obsequios que deben recibir los funcionarios públicos, dijo que “el regalo no es personal, no lo pagó Buzzi de su bolsillo, por tanto corresponde devolverlo al pueblo de Chubut, más aún conociendo el origen de los fondos y que su valor supera 30 veces el declarado por Scioli para su lancha”
En su reciente visita a la provincia de Chubut, el Gobernador Scioli recibió una lapicera estilográfica marca "Mont Blanc Silver Solitaire". Un obsequio que le entregó su par Martín Buzzi y que según la
resolución 258 que salió en el Boletín Oficial de esa provincia fue adquirida en forma directa en la suma de $ 30.108.-
Según el Senador provincial Gustavo De Pietro (UCR) “el obsequio debe ser devuelto pues no se trata de un regalo personal que haya pagado Buzzi con su dinero, fue comprado con fondos públicos, pertenecientes al pueblo de Chubut, para un fin personal de su gobernador que era quedar bien con Scioli”
Para el legislador “si bien no existe una ley en nuestra provincia que prohíba recibir regalos u obsequios a los funcionarios, está claro que éticamente nuestro Gobernador no puede quedarse con el mismo conociendo el origen de los fondos para su adquisición y su valor, que supera en 30 veces al declarado por el propio Scioli para su lancha”
“Se debe – continuó- desalentar toda práctica que promueva la aceptación de obsequios, provengan del ámbito público o privado, para evitar posibles conflictos de intereses o la toma predispuesta de decisiones”
       

Ley de Ética pública provincial


De Pietro es autor, junto con otros senadores provinciales, de una ley que además de regular la presentación de declaraciones juradas patrimoniales, terminando con la legislación de la dictadura, propone un régimen de obsequios, donde directamente se prohíbe a los funcionarios públicos recibir regalos, obsequios o donaciones,  sean de cosas, servicios o bienes, con motivo o en ocasión del desempeño de sus funciones, y para el caso de que los obsequios sean de cortesía o de costumbre diplomática,  se deberá reglamentar la registración y cómo se incorporan al patrimonio del Estado para ser destinados a fines de salud, acción social y educación o al patrimonio histórico-cultural si correspondiere.