El
dato surge de una investigación realizada por la Universidad Siglo 21 en la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Rosario, Córdoba, Corrientes, Tucumán,
Comodoro Rivadavia y Mendoza. Los
encuestados además, creen que en la actualidad los jóvenes comienzan a ingerir
bebidas alcohólicas a partir de los 13 años.
Buenos
Aires, 28 de septiembre de 2015.- La mitad de los argentinos reconoce haberse
embriagado al menos una vez en su vida. Tal aseveración parte de un estudio
realizado por la Universidad Siglo 21 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires,
Rosario, Córdoba, Corrientes, Tucumán, Comodoro Rivadavia y Mendoza, entre más
de 1000 personas. Dicho relevamiento también arrojó la creencia de que los
adolescentes comienzan a tener alguna relación con el alcohol a partir de los
13 años de edad.
Entre
quienes manifestaron haberse embriagado alguna vez en su vida, se indagaron dos
aspectos vinculados con esa experiencia: por un lado, la frecuencia de dicha
conducta y por el otro, la edad (promedio) en la que se embriagaron por primera
vez.
Sobre el
primer aspecto, se consultó a las personas cuántas veces habían alcanzado el
estado de ebriedad. Al respecto, puede observarse que el 75% lo hizo más de una
vez, ya sea de manera ocasional o con mayor frecuencia. Aquí se hallaron
diferencias entre ambos sexos y los grupos etarios. Entre las mujeres que
admitieron haberse embriagado, el 63% expresó haberlo hecho en más de una
oportunidad mientras que en los hombres, la proporción sobre el mismo aspecto
fue de un 82%.
En cuanto a
los grupos de edad, se pueden observar patrones similares entre los más jóvenes
y el grupo de 31 a 40 años de edad. En ambos segmentos, la proporción de
encuestados que alcanzó el estado de ebriedad más de una vez supera el 80%. Tal
proporción disminuye al 73% y 51% al considerar los adultos de 41 a 50 años y
los adultos mayores, respectivamente. En otras palabras, los más jóvenes
recurren con mayor frecuencia en el consumo intensivo de alcohol.
Además, las
personas que participaron del estudio indicaron que la primera vez que probaron
el alcohol tenían, en promedio, 17 años de edad. En la comparación entre ambos
sexos, los hombres manifestaron haber probado el alcohol en edades menores que
las mujeres (16,4 vs. 18,2 años). Al considerar las diferencias por edades, los
segmentos más jóvenes evidencian el primer consumo de alcohol más temprano en
relación con los adultos mayores (15,9 vs. 18,6 años).
En ambos
sexos se presenta el mismo patrón en relación con el primer consumo de alcohol
(los jóvenes han probado esta bebida antes que los adultos). En cuanto a las
mujeres, cabe mencionar que las adultas mayores (51 a 60 años) fueron quienes
más postergaron la primera ingesta de alcohol, la cual tuvo lugar en una edad
cercana a los 20 años, mientras que las más jóvenes lo hicieron a los 16 años.
Por su parte, los varones adultos mayores manifestaron haber probado por
primera vez el alcohol a los 17 años, mientras que los más jóvenes lo hicieron
a los 15,6 años de edad.
En tanto que
los participantes del estudio creen que los 12 años será la edad promedio en la
cual los adolescentes consumirán por primera vez alguna bebida alcohólica
dentro de 10 años.
“El trabajo indagó sobre la propia conducta de
los participantes del estudio y acerca de la percepción de éstos sobre la edad
en la que la gente suele probar, por primera vez, este tipo de bebidas. Sobre
este último aspecto se pidió a los encuestados que indiquen su opinión sobre lo
que ocurre en la actualidad y su perspectiva para los próximos 10 años”,
explicó el Magíster Gabriel Escanés, de la Secretaría de Investigación de la
Universidad Siglo 21.
Signos del estado de ebriedad en las
personas
En un primer
momento, se identificaron 5 signos que podrían dar cuenta de que una persona
alcanzó un estado de ebriedad: a) desubicación, b) mareo, c) desinhibición, d)
risa excesiva y e) descompostura. Luego, en un segundo momento, se pidió a los
encuestados que manifestaran su opinión sobre los signos identificados.
Los
resultados indican, casi sin discrepancias, que uno de los principales signos
para identificar el estado de ebriedad en las personas es la descompostura
ocurrida luego de consumir alcohol.
Además,
existe un amplio nivel de acuerdo con respecto a considerar a la desubicación
de una persona como uno de los signos que permite reconocer que un sujeto se
encuentra en estado de ebriedad como consecuencia del consumo de alcohol. En
este sentido, casi 9 de cada 10 encuestados creen que la adopción de conductas
“fuera de lugar” está asociada con el estado de embriaguez.
El 64% de
los participantes cree que la reducción o eliminación de los frenos
inhibitorios se puede interpretar como un indicador de ebriedad, mientras que
el 32% cree lo contrario.
Si bien los
5 signos representan alteraciones de la conducta o percepción de las personas
que consumen alcohol, y por tanto están vinculados con la embriaguez, sólo los
primeros dos (descompostura y desubicación) aparecen como rasgos identificados
con el estado de ebriedad para la gran mayoría de los encuestados.
Experiencia propia en estados de ebriedad
Finalmente,
se consultó a los participantes sobre la propia experiencia en relación con el
consumo excesivo de bebidas alcohólicas hasta alcanzar el estado de ebriedad.
Al respecto, la mitad de los encuestados expresó que, alguna vez en su vida,
había consumido alcohol hasta embriagarse. Sin embargo, al desagregar los
resultados se encuentran algunas diferencias interesantes entre ambos sexos y
grupos etarios.
Los hombres
expresaron haberse emborrachado en mayor medida que las mujeres. Entre los
primeros, el 64,6% alcanzó un estado de ebriedad mientras que la proporción se
reduce al 35,4% cuando se considera la experiencia femenina.
En cuanto a
los 4 segmentos de edades, las diferencias son notables. Entre los jóvenes, el
66% manifestó haberse emborrachado alguna vez en su vida, mientras que tal
proporción se reduce a menos de la mitad al considerar a los adultos mayores (3
de cada 10).
Acerca de
Universidad Siglo 21. Es la institución educativa de nivel superior privada más
elegida por los argentinos, según datos oficiales del Anuario de Estadísticas
Universitarias del Ministerio de Educación de la Nación. Fue creada en 1995 por
Juan Carlos Rabbat y Cristina Schwander y, actualmente, se encuentra celebrando
sus 20 años de trayectoria. Tiene sede en la ciudad de Córdoba y presencia en
las 23 provincias argentinas, a través de más de 250 Centros de Aprendizaje
Universitario (CAUs). En Universidad Siglo 21 estudian más de 50.000 alumnos y
cuenta con más de 10.000 egresados. Dicta 24 carreras de grado, 12 de pregrado
y carreras de posgrado y formación continua a través de las modalidades
Presencial, Senior, Distribuida y Distribuida Home, lo que la convierte en la
universidad líder en Argentina en el desarrollo y dictado de programas de
educación online y de diplomaturas que incentivan la formación personal de las
personas.