Dos accidente de bienvenida al 2015

En las primeras horas de la mañana del 1ro. de enero los casarenses despertamos con el ulular de la sirena de los bomberos y era el presagio de que algo malo había sucedido, y era asi.
Al parecer todo vale, autos haciendo picadas que al parecer todos saben y escuchan pero nadie ve o no quieren ver al igual que ocurre con las motos. Eso si cuando ocurren las cosas vienen los lamentos y la archiconocida frase, “sabía que eso iba a pasar porque es cosa de todo los días”. En esta ocasión no hay que
lamentar víctimas, solo autos destruidos, pero seguramente no va a pasar nada, y todo va a seguir igual.
En cuanto a los hechos, cerca de las 6:30 los bomberos, cerca de las 6:30 los bomberos debieron acudir al accidente que ocurrió en  calle Chiclana y San Luis en la zona del nuevo basural, perdón la zona de los bajos donde se van a recuperar los terrenos, donde abundan las cunetas profundas y de sumo peligro. Allí colisionaron una camioneta VW Amarok conducida por Facundo Aguirre y un VW Gol el que quedó destruido, conducido por un joven de apellido Naveiras. Ambos vehículos terminaron en el canal y si bien los ocupantes salieron por sus propios medios y fueron conducidos al hospital por ambulancia de Bomberos salvaron sus vidas por milagro.
El segundo hecho a la salida del Boliche, en la intersección de la ruta Guillermo Lowenthal con el camino real a Algarrobos-Moctezuma, cuando un Renault Megane conducida por la mujer, del Comisario Distrital retirado Ponce, quien la acompañaba, fue embestido por un Renault 18, cayo conductor, según lo que se supo presentaría un grado de alcoholemia mayor al permitido, ocasionándole daños de consideración al Megane, siendo trasladados al Hospital para determinar si tenían alguna lesión de importancia.

Es dable de señalar que el año pasado, para navidad, ocurrió un accidente que dejo con graves lesiones a una joven que todavía sigue en tratamiento cuando el auto volcó en calle Lavalle ya que a la salida del boliche no le permiten a los automovilistas regresar por el acceso haciéndolos venir por calle de tierra.