También ingresaron en la metalúrgica de Campoy

La misma noche del robo a Cingolani y prólogo del mismo los ladrones “visitaron” la metalúrgica de Campoy donde forzaron la chapa de un portón lateral e ingresaron al galpón, después forzaron la tranca de la puerta de rejas de la oficina para luego ingresar a la misma. Si bien revolvieron algunas cosas de ahí no se llevaron nada, eso que había algunas pocas herramientas.
Con todo el tiempo de su lado, escogieron unas escaleras de madera, por lo que se presume que el objetivo claro era Cingolani, y si de paso había algo de valor en lo Campoy también se lo llevaban.

Se ve que resultaron petizas, las dejaron tiradas en el parque y regresaron por unas más largas.
Había una de doble hoja a la que desarmaron y se llevaron una parte.

Se podría decir que la fábrica de Campoy fue el trampolín que tuvieron los ladrones para cometer el hecho delictivo de la rectificadora. 
Campoy se salvó por poco, Cingolani no corrió con la misma suerte.
La chapa que forzaron del portón
Barretearon la puerta de rejas de la oficina