Un
porcentaje importante de los granos que se comercializan en la Argentina es
bajo la modalidad de contratos a fijar (Cuadro 1). El precio pizarra, principal
referencia de esta modalidad, es elaborado por la Cámara Arbitral de la Bolsa
de Cereales de Rosario y se publica sobre la base del acuerdo de los semaneros,
teniendo en cuenta la información que les llega de los negocios realizados el
día anterior. Así, quien fija por pizarra no vende nunca con el precio que se
está pactando en el mercado en el momento de la transacción, sino que lo hace
sobre la base del día anterior.
Cuadro 1.
Participación de la modalidad a fijar en el total comprado de soja
Valores en
millones de toneladas, medido a la primera semana de mayo de cada campaña
Fuente:
Movimiento CREA sobre la base de datos de Minagri-DMA.
En los
últimos meses, algunos de los contratos a fijar comenzaron a registrar
variaciones en las condiciones de fijación de precio: se cerraron contratos de
compra tomando como referencia el valor mercado del comprador. (*)
Se debe
tener en cuenta que el precio pizarra que fue modificado es establecido y
publicado por la Cámara Arbitral de la Bolsa de Cereales de Rosario, y a partir
de marzo de 2013 incorpora no sólo los precios de referencia que surgen de las
operaciones de compraventa que se informen, sino que se agrega al cálculo los
precios de los mercados de futuros de Buenos Aires (Matba) y de Rosario
(Rofex).
Por otro
lado, la fijación mediante valor de mercado comprador se pacta a partir del
precio que la empresa adquiriente ofrece pagar ese día a sus oferentes. Esta
modalidad implica que el productor no necesariamente tendrá un precio de
referencia pública sobre el cual concretar la venta e impide que la mercadería
pactada ingrese a la puja de oferta y demanda del mercado y genere precio. Otra
desventaja es que este tipo de contratos no estipula instancias de arbitraje.
Se debe
tener en cuenta que, en la actualidad, las operaciones on line son factibles de
realizar en todo el territorio nacional. Y que los productores, si aceptan
operaciones a fijar, lo hacen por un acuerdo entre partes con el comprador, ya
que no es obligatorio tomar la pizarra como referencia. Pueden pactar entre las
partes con otro mercado de referencia, como el de futuros del Matba.
Alcances de la pizarra
La Cámara
Arbitral de la Bolsa de Cereales de Rosario informó sobre los alcances de la
pizarra en un comunicado publicado en 2011. En el mismo se estableció que
"los precios de pizarra siempre fueron meramente orientativos", y esta
condición es todavía más clara y explícita a la luz del artículo 3 del Decreto
1058/1999, que aclara que “no son obligatorios para las partes en ningún
segmento de la comercialización, salvo pacto expreso en contrario”.
Además, al
ser publicados al día siguiente, las pizarras no pretenden (ni pueden) tener
otra finalidad que indicar, de manera histórica, orientativa y puramente
referencial, el nivel de precios que alcanzó un determinado producto, en
determinadas condiciones, el día anterior.
Es decisión
comercial de cada operador utilizar o no los valores informados por las Cámaras
como referencia para hacer negocios o para ponerle precio a una mercadería
entregada.
Modalidades en otros países
En un
informe preparado por los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola
(CREA), se indica que en otros países productores de granos no existen precios
de referencia que reflejen exclusivamente operaciones que comprometan la
entrega física de granos. En términos generales, las modalidades de venta están
regidas a partir del cálculo de paridades (bases) locales con respecto a
mercados externos de referencia, como el CME de Chicago. Estos últimos, a su
vez, forman precio en función a una combinación de los fundamentos del producto
y la intervención de otros actores como inversores y/o fondos.
Uruguay no
cuenta con un mercado concentrador de las operaciones agrícolas, como el Matba
o el Rofex. Sí tiene la Cámara Mercantil de Productos del País, que publica los
precios de referencia que emergen de las comisiones de información de precios
integradas por representantes de las entidades gremiales.
En
definitiva, las herramientas más habituales de compraventa de los productores
uruguayos, en el caso de ventas a futuro, son los contratos forward, es decir
contratos que se pactan entre productor y exportador. Para las ventas de
mercadería disponible o a fijar se opera tomando como precio de referencia el
CME de Chicago descontando primas según lugar de venta.
En Brasil
existen dos canales de mercado para la soja. En primer lugar, está el canal que
utiliza el productor agropecuario, más conocido como mercado de mostrador,
consistente en entregar los granos cosechados a un centro acopiador, que puede
ser una cooperativa, comerciantes o industria; para 2011, sólo el 5% de los
agricultores brasileños tenía capacidad de almacenaje propia.
En un
segundo nivel, se encuentran las transacciones entre empresas; es decir las
cooperativas, acopiadores o industrias que venden a otras industrias o a la
exportación. Este canal se conoce como mercado de lotes.
Un bajo
porcentaje de la cosecha es vendido a fijar y los productores pactan tomando
como referencia los precios del disponible que se publican diariamente por cada
estado, aunque no quedan registrados en un contrato.
El mercado
de referencia internacional de granos está en EE.UU, con lo cual las
operaciones de ese país se fijan en función a las cotizaciones del Mercado de
Chicago. El grano entregado a fijar se pacta sobre la base del mercado más o
menos una prima generalmente acordada en el momento del contrato.
Igual que en
Brasil, gran parte del volumen es vendido y entregado en la cosecha. Lo que no
se vende, por lo general es acopiado por los mismos productores en sus
establecimientos. En estos casos, mayoritariamente se operan coberturas,
también en el Mercado de futuros de Chicago.
En Canadá se
comercializa de distintas formas dependiendo el producto. En el caso de la
canola, el precio se fija sobre la base de futuro ICE de Winnipeg, al cual se
le descuenta un basis en concepto de manipulación y transporte. En general, el
precio de Winnipeg se comportan de manera similar a la cotización de soja en
Chicago, con lo cual siguen esta cotización también. En el caso del trigo, el
precio se construye considerando el futuro de Minneapolis con basis similares a
los de canola.
Reflexiones
Una de las
preguntas que se plantean en la actualidad es cuáles son las opciones
disponibles para los productores en este marco de cambios en la formación de
los precios de referencia.
Se advierte
que la venta bajo la modalidad a fijar presenta la ventaja de establecer en
forma previa la logística de la entrega de la mercadería. Sin embargo, tiene la
desventaja de pactar condiciones sin precio, que ya no va a contemplar la
posibilidad de varios compradores, sino con quien se haya pactado previamente.
Otra desventaja es la disminución del volumen demandado por los compradores, ya
que la mercadería a fijar no entra dentro de la puja de compraventa.
También se
observa que existen pocos mercados institucionales en el nivel internacional y
que la Argentina cuenta con ámbitos de formación de precios donde el productor
puede vender disponible o futuro si lo prefiere teniendo en cuenta las
distintas calidades y zonas.
El mercado
es información, porque los precios son información resumida. Un mercado
transparente de granos, donde se refleje la información dispersa en los
precios, requiere un alto nivel de flujo. Si eso no sucede, se achica el
mercado de referencia, aspecto que promueve la información asimétrica. Una de
las principales consecuencias de la información asimétrica es que su acceso se
vuelve más dificultoso, perjudicando a aquellos que no cuenten con los recursos
para su acceso, que en general son los productores de menor escala.
Finalmente,
las experiencias internacionales muestran que no todos los productores
alrededor del mundo cuentan con mercados institucionalizados propios, la
información es dispersa y son centrales las referencias locales. Nuestro país
tiene una fortaleza en este aspecto, que debería ser aprovechada por toda la
cadena comercial.
(*) Nota: hay quienes toman a fijar y tomaron
siempre la pizarra. No todos ofrecen mercado propio o mercado del comprador.
Fuente: CREA