La violencia familiar en la casa, justo ahí
donde estamos “desnudos” y no nos controlan con cámaras, es una prueba de la
facilidad con que retrocedemos y volvemos a colgarnos de los árboles.
Durante el
primer semestre del año, las denuncias por maltrato psicológico se mantuvieron
al tope de los llamados efectuados a la línea gratuita del Ministerio de
Desarrollo Social bonaerense dispuesta para víctimas de la violencia doméstica.
Según un
informe elaborado por la dirección de Políticas de Género de esa cartera, entre
enero y junio de este año se recepcionaron 393 llamados a la línea gratuita
0800-666-5065 contra la violencia familiar, que se suman a los casos
denunciados en cada una de las 65 mesas locales que funcionan en municipios de
la Provincia.
Se indicó
que, en total, el 48,6 por ciento de los llamados fueron por casos de maltrato
psíquico y emocional, el 41,73 por ciento por maltrato físico y el porcentaje
restante correspondió a casos vinculados con el abandono de persona, abuso
sexual y violencia económica.
El 31,25 por
ciento de las denuncias hechas en el primer semestre fueron realizadas por
personas de más de 50 años; el 28,66 por ciento por la franja que va entre los
30 y los 40 años; el 24,26 por la de 41 a 50 años y el 15,81 por ciento por
gente de entre 20 y 30 años.
“La
violencia familiar no es un problema de puertas adentro, sino un problema de
todos”, indicó el ministro de Desarrollo Social, Martín Ferré y destacó la
importancia de que las víctimas o el entorno mismo se comprometa y se animen a
denunciar y pedir ayuda “de modo de que podamos poner en marcha los mecanismos
de contención y los ayudemos a superar este drama”.
